Primero de Mayo por las conquistas de los trabajadores

Cuando este Primero de Mayo millones de personas en el orbe ocupen las plazas con peticiones de justicia, educación, salud para todos, empleos, pensiones y otros derechos pisoteados por la crisis capitalista, ninguno será pinero, quienes, por el contrario, haremos de la celebración proletaria una hermosa fiesta del pueblo.

Fiesta que también constituirá tribuna especial para multiplicar el reclamo por el regreso de los Cinco Héroes antiterroristas cubanos presos injustamente en las cárceles del imperio, que también constituye un reclamo al Presidente de los Estados Unidos  para que cambie de una vez y por todas y levante el cruel bloqueo que afecta a Cuba por más de medio siglo.

Con el espíritu de trabajo que inspira el lema central que mueve a los cubanos para la celebración del Primero de Mayo “Preservar y perfeccionar el Socialismo”, se llenarán las avenidas y espacios públicos este martes como la mayor muestra del incondicional ejemplo de unidad y apoyo a la Revolución que se haya manifestado por este pueblo.

Desde el 14 de abril y hasta el cinco de mayo, se ha extendido esta jornada  conmemorativa con la realización de 21 actividades centrales, 807 actos de reafirmación revolucionaria y convocatoria, matutinos, festivales deportivos y culturales, en los que han participado más de 25 000 trabajadores de esta ínsula.

 Este territorio que se proyecta hoy con el concurso de sus laboriosos hijos no ha podido escapar en los últimos años  a las adversidades que han impuesto los fenómenos naturales, acrecentadas con la política agresiva de los Estados Unidos contra nuestro país por más de un siglo, recrudecida desde el triunfo revolucionario y ampliada a partir de las últimas décadas.

El bloqueo económico y financiero, la aplicación de la Ley Torricelli, la Helms Burton y el Plan Bush desde el 2004 y actualizado en el 2006 y el 2007, incitan continuamente a la contrarrevolución para subvertir la obra revolucionaria y le ponen cada año más de 100 millones de dólares para comprar las almas y las desalmas de los anexionistas y vende patria que residen aún en nuestro país.

No ha sido fácil salir adelante en esas circunstancias. Sólo la firmeza de principios, la voluntad de este pueblo y de sus trabajadores, han hecho posible navegar en este mar bravío que impone adoptar medidas especiales.