martes, enero 15, 2013
Nuevas normas y satisfacciones en Isla de la Juventud
Por Diego Rodríguez Molina
Tomado de Islavisión Digital
Con total normalidad transcurren en la Isla de la Juventud desde este lunes los trámites para la puesta en práctica de las nuevas normas relacionadas con la actualización de la política migratoria cubana.
Si motivo de satisfacción fue para los cubanos conocer en octubre pasado las modificaciones contenidas en el Decreto-Ley No. 302, que cambia varios artículos de la Ley de Migración de 1976, y otras normas jurídicas sobre el asunto, recogidas todas en la Gaceta Oficial No. 44 –del 16 de octubre de 2012– ahora se une al regocijo la confianza del pueblo en la flexibilidad y justeza de las modificaciones que entran en vigor.
Con serenidad y madurez los ciudadanos acogen los pasos iniciados por Cuba en aras de no sólo actualizar, sino también ajustar a las actuales condiciones y el probable escenario futuro, la línea estratégica y táctica en tan sensible tema, relacionado igualmente con las transformaciones económicas y sociales emprendidas.
La amplia información ofrecida durante los últimos meses y el interés por esclarecer cada interrogante, así como escuchar las preocupaciones, ha sido de mucha complacencia y utilidad para todos, menos para el Gobierno de EEUU, empeñado en seguir manipulando la política migratoria como uno de los principales ejes de sus campañas para desacreditar el avance irreversible de nuestro proceso revolucionario.
¿DE DÓNDE VIENEN LOS OBSTÁCULOS?
Molesto con la favorable acogida de ese paso soberano de los cubanos, EE.UU. anunció que no habrá cambios en su política hacia Cuba, víctima durante décadas de la criminal Ley de Ajuste Cubano desde el norte para estimular las salidas ilegales e inseguras que han provocado pérdidas de vidas humanas, al tiempo que obstaculiza la normalización de relaciones y del flujo migratorio entre ambas naciones y cuestiona cuanto noble esfuerzo se hace aquí.
Ahora los ciudadanos de ese país serán los únicos que para viajar a Cuba tendrán que pedir autorización a su gobierno, mientras este continúa limitando el otorgamiento de visas a los cubanos, a pesar de las facilidades dadas aquí en virtud de la flexibilización en la política migratoria.
Por eso no debe sorprender que el imperialismo y sus asalariados internos traten de seguir alimentando su campaña contrarrevolucionaria, como tampoco debe extrañar que Cuba tenga en cuenta el derecho del Estado Revolucionario de defenderse de los planes hostiles, subversivos y desestabilizadores del imperio y sus aliados.
Por eso en legítima defensa se mantendrán medidas para preservar el capital humano creado por la Revolución frente al robo de talentos por parte de gobiernos y organizaciones reaccionarios, de ahí que un grupo minoritario de personas estará sujeto a regulaciones especiales para su salida del país, sin implicar una prohibición, sino la autorización correspondiente.
LOS REALES MOTIVOS Y LA GRAN MENTIRA
Con quienes conversé a la entrada de la Oficina de Trámites Integrales del MININT en la capital del ultramarino territorio cubano, expresaron su complacencia por las modificaciones, así como la agilidad del servicio, al tiempo que aclararon que sus salidas al exterior tenían como motivos la reunificación familiar y razones económicas.
A Juana la vi salir contenta de la instalación luego de ponérsele un cuño en el pasaporte de su hijo para legalizar su viaje al exterior.
“No será definitivo, solo temporal, –aclaró–. Ahora tengo dos años para estar afuera y regresar antes de ese plazo sin perder la condición de residente".
Un joven que allí preparaba los documentos requeridos junto a su padre para salir igualmente de forma temporal, argumentó: “Se equivocan quienes ocultan nuestras verdades y dan la falsa imagen de que los cubanos “huyen” de su país por razones políticas. Es una gran mentira”.
La eliminación del llamado “permiso de salida” y cartas de invitación, la ampliación del tiempo para permanecer en el exterior –extendido de 11 a 24 meses– sin necesidad de trámites y la flexibilización de las regulaciones para la relación con su país de origen de aquellos que emigraron anteriormente, forman parte de las nuevas regulaciones migratorias puestas en práctica por decisión soberana del Estado.
Las medidas establecen, asimismo, que los menores de 18 años podrán salir con la previa autorización de sus padres o representantes legales.
Tales decisiones no las adopta Cuba en respuesta a imposiciones de nadie y sí en aras de favorecer movimientos migratorios de forma legal, ordenada y segura, así como para fortalecer su relación con la emigración.
No hay comentarios:
Publicar un comentario