martes, agosto 13, 2019

La ética de "pensar como país" en la Isla de la Juventud



Por Sergio I. Rivero Carrasco

Abrazar hoy el concepto “Más pineros, más cubanos” nos proporciona el ímpetu para mantener vivo el pensamiento y la obra de Fidel en el aniversario 93 de su natalicio, y a la vez, apoyar el llamado del Presidente cubano Miguel Díaz-Canel  a “Pensar como país”, para lo cual,  como pineros, debemos incorporar con toda la fuerza y la conciencia, los valores de laboriosidad, patriotismo, lealtad, consagración, solidaridad  y voluntad para hacer más libre y próspera a la Patria.



Desde hace algún tiempo hemos apreciado cómo el Presidente  cubano insiste en todos los  espacios posibles para convocar a los trabajadores, estudiantes, directivos y al pueblo en su conjunto a “pensar como país”. También poco a poco ha ido introduciendo  en qué consiste, cuál es su traducción convertida en acciones concretas para lograrlo en cada rinconcito de Cuba.

Consideramos que “Pensar como país” es ante todo, una actitud ante la vida, una condición ética que debe moderar la actuación de cada cubano en su puesto, en la familia, el barrio y la sociedad en su conjunto. Es estar convencido de que la esencia de esa ética radica en dejar de ser yo y convertirnos en nosotros, es como decimos en buen cubano “ponerse en el zapato del otro”, alejado de toda vanidad, individualismo, envidia, celos, egoísmo, fortaleciendo los valores universales que hacen a los seres humanos virtuosos, sencillos, honestos, sociables, laboriosos y decentes.

Los pineros tenemos mucho que hacer para “pensar como país”; el hecho de ser una isla  parte de otra Isla no nos diferencia del resto, por el contrario, cada vez nos compromete y une, porque en gran medida dependemos de ella. Es abandonar la mentalidad de consumidores para pensar y actuar como productores activos cumpliendo con las políticas trazadas por el país de cumplir el Plan de la Economía y los aportes al presupuesto de la Nación, incrementar las producciones exportables, sustituir importaciones y diversificar las realizaciones en las diferentes industrias de manera que se pueda dar respuesta a las demandas de alimentación y de servicios básicos, educación, salud, construcciones, con un sentido práctico y creador.

“Pensar como país” es también cumplir con los planes productivos, aplicar la ciencia y la tecnología a la producción y los servicios, a la educación y la salud en su mayor expresión; es impulsar el Proceso de Informatización de la Sociedad Cubana implementando los servicios de comercio electrónico, las plataformas que permiten humanizar la vida de los pineros en las gestiones de pago  por los servicios que recibe de las distintas instituciones, las aplicaciones para la telefonía móvil con acceso a Internet, así como las terminales de cobro mediante el post en servicios comerciales e incrementar los servicios de Internet para la investigación, la economía, el deporte y la cultura.

Para un pinero “pensar como país” es además,  entregar su inteligencia y esfuerzos al quehacer colectivo, al desarrollo económico-social, científico, tecnológico, abierto y sincero. Hacer posible que lo aprobado en la nueva Constitución de poner al Municipio en el centro de la atención y gestiones de Gobierno, puedan hacerse efectivos mediante el desarrollo de proyectos de desarrollo local que potencie la comunidad y el barrio en las producciones y servicios básicos a la población y la alimentación.


“Pensar como país” en la Isla de la Juventud, es lograr el cambio de mentalidad con objetividad, abandonar todo vestigio de burocratismo, amiguismo, ilegalidad, compadreo, escepticismo y estimular la solidaridad, la atención oportuna y de calidad al pueblo; es educar con amor al igual que atender con excelencia humana a los enfermos en cualquiera de nuestras instituciones; es sustituir al no con el SÍ, el yo por el nosotros, el después por el ahora, y el nunca por el siempre.  

Es abandonar el sentimiento localista y ampliar la proyección del quehacer cotidiano hacia el beneficio de la nación, es dimensionar y preservar el valor de la UNIDAD como fundamento de la Nación, como principio de principios que sirve de sostén y fortaleza inquebrantable, frente a las más agresivas posturas del imperio defendiendo los valores esenciales del comportamiento humano enfocados a las costumbres, tradiciones, modos de actuación y de pensamiento, entre lo más avanzado y hermoso de las razones que nos distinguen como CUBANOS. 


Para “Pensar como país”, por último,  los invito a sumarse a la campaña pinera “Atrévete a ser más” y presenta tu proyecto que contribuya al desarrollo local, a militar en el bando de los inconformes, comprometidos y laboriosos, de los que pegan el oído a la tierra, agradecidos y alegres de batallar cada día para ver florecer a nuestro país; es sentir que al ser cada día más pineros, somos más cubanos.

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