EN EL DÍA MUNDIAL DE LA SALUDPor Sergio Rivero Carrasco
Después de laborar sin descanso todo el día, no podía terminar para mí sin dedicarle una letras a este siete de abril Día Mundial de la Salud, tan importante para la preservación de la vida del hombre en la tierra, precisamente en momentos en que se debate la verdadera supervivencia a los desastres naturales, a los violentos cambios climáticos y a las interminables guerras, que aniquilan a la especie humana.
En esta ocasión bajo el lema Colaboremos por la salud, se debate también lo relacionado con la creciente crisis mundial de los recursos humanos que entorpece la prestación de la atención a la salud en muchas latitudes, específicamente los desposeídos que no tienen los recursos monetarios para pagar estos servicios esenciales.
Si contrastamos esa cruda realidad con la situación que vive Cuba nos enorgullecemos por multiplicar la solidaridad y si con mayor precisión nos referimos a este pequeño territorio insular, la Isla de la Juventud, con solo
2 200 km2 cuenta con una facultad de Ciencias Médicas con más de 500 estudiantes en todos los años, de primero a sexto, en la que se forman médicos generales, licenciados en enfermería, especialistas de primer grado en 15 especialidades médicas además de otras tantas en Tecnología de la Salud y un programa integral de salud que abarca a través de los Médicos de Familia y los tres Policlínicos Docentes a toda la población.
Los recursos humanos vinculados al sector se multiplican y ya contamos con más de 3 000 trabajadores en el sector.
Ya más de 250 médicos, personal de enfermería, técnicos y especialistas aseguran como cooperantes la cobertura en diversos países de África, Asia y América Latina y el Caribe, a la vez que contribuyen como profesores a la formación de estudiantes en esos países.
Luego que el programa se extendió al África Subsahariana y al Asia, deja en esta última una profunda huella con la presencia en Pakistán del Contingente médico Henrry Reeve.
Para que tengan una idea de la significación que tiene para los profesionales de la Salud cubanos, su presencia en Pakistán les reproduzco fragmentos de un correo recibido de uno de ellos que se desempeña como director del Hospital Carlota II en la Cachemira Paquistaní, el Especialista de Segundo Grado en Cirugía Hugo Fornier:
“ Hermano, gracias por preocuparte por nosotros. Aquí estamos guapos y faja’os para que todo salga bien. Las gentes nos quiere mucho y se ponen tristes cuando piensan que un día tenemos que regresar a nuestra Patria Querida. Trabajamos mucho y en condiciones muy difíciles, con temperaturas de hasta menos 30 grados en las casas de campaña y en condiciones de campaña que aunque se realiza con el máximo de seguridad e higiene, dificulta nuestra labor y exige de nosotros un esfuerzo superior.
También atendemos muchos niños y gran cantidad de personas politraumatizadas a las que hay que darles un tratamiento especial.
Nosotros estamos orgullosos de la labor que estamos desarrollando y sentimos el alto privilegio de integrar el Contingente Henry Reeve.
"El Comandante en Jefe puede contar con nosotros para cualquier misión”.
Así son nuestros médicos formados en el humanismo de la Revolución. Los más de 200 millones de personas que carecen de asistencia médica reclaman de los gobiernos y de los pueblos una mayor voluntad para apostar por la vida, por la calidad de vida del hombre y por la satisfacción de unos de los derechos humanos más extinguidos hoy: La atención a la Salud.
