A los que no creen en la democracia cubana y en el beneplácito de los cubanos para realizar su derecho al veto, pongan bien atentos sus cinco sentidos para que puedan procesar lo que aquí va a acontecer.
La Audiencia Parlamentaria dada por Ricardo Alarcón de Quesada, Presidente del Parlamento cubano, es el inicio de un proceso para aumentar el conocimiento, la comprensión, la cultura cívica y ciudadana alrededor de los procesos electorales, que conducirán este año y el próximo a varias elecciones.
Así destacó Alarcón de Quesada, al resumir una audiencia convocada por dicho órgano legislativo, sobre el sistema electoral cubano y el sistema político de la Isla, efectuada este jueves en el Palacio de Convenciones de La Habana, donde participaron diputados, dirigentes del Gobierno en provincias y municipios, representantes de organizaciones políticas y de masas, entre otros.
Alarcón subrayó que en Cuba no hay un solo día de elecciones, como sucede en Estados Unidos, donde se realizan un martes del mes de noviembre, en horario laboral. En Cuba —enfatizó— hay decenas de miles de elecciones, de momentos en que los ciudadanos tienen que adoptar importantes decisiones, y deben hacerlo con el mayor conocimiento para que puedan ejercer una mejor participación, de forma consciente.
Al referirse a los rasgos distintivos del proceso electoral cubano, significó que tenemos un sistema de inscripción automático, universal, gratuito y sencillo. ¿En cuántos países del mundo existe este derecho para su ciudadanos?, se preguntó, para responder que en muy pocos.
Abundó que en otros lugares los ciudadanos para inscribirse en los registros electorales tienen que hacer trámites, resolverlos en horarios laborales, pagarlos, y hasta si se mudan, como sucede en los Estados Unidos, pierden ese derecho por un tiempo según la legislación de cada estado.
Explicó que ante una situación similar, en Cuba los ciudadanos se desplazan con sus derechos a la salud pública, a la educación, y también con sus derechos electorales.
Como otro elemento importante citó que los registros de electores en la Isla son públicos, transparentes, y bajo el control popular, en cada barrio, lo que contrasta con el acontecer en otros lugares donde dichos registros están en manos de camarillas y ubicados en lugares opacos.
Agregó que Cuba es el único lugar del planeta donde los candidatos al gobierno son nominados directamente desde las comunidades de residencia por los propios electores, en asambleas abiertas, donde los ciudadanos conocen y valoran previamente las biografías de los propuestos en unas 15 mil demarcaciones existentes en el país
Reiteró que el sistema electoral cubano busca la participación de los ciudadanos en todo momento, en vinculación directa de los elegidos con los electores.
Valoró que no es casual la aclaración incluida en el Plan Bush sobre el objetivo de hacer desaparecer en la Isla el registro electoral automático y universal, como también eliminar la postulación de los candidatos por parte del pueblo, para copiar el sistema norteamericano, mediante el cual son los partidos los que nominan sus candidatos.
Consideró de vital importancia el perfeccionamiento del sistema electoral con la participación más consciente, más organizada y más culta de la población.
EVIDENTE CONTRASTE ENTRE LAS ELECCIONES DE AYER Y HOY
El historiador Eduardo Torres Cuevas caracterizó las elecciones en Cuba antes del triunfo de la Revolución, el primero de enero de 1959, cuyos signos más sobresalientes eran la demagogia, la corrupción, y el objeto de enriquecimiento de la democracia burguesa, ajena totalmente a las necesidades y requerimientos de los ciudadanos.
Jorge Lezcano Pérez, asesor del Presidente del Parlamento Cubano, se refirió a las particularidades del sistema electoral en la Isla, donde el pueblo es el que postula y elige a sus representantes en el Gobierno, sin la intervención del Partido.
Entre las diferencias de nuestro Parlamento y el de otros países, citó, además, que aquí los diputados no reciben salario por esa función y se mantienen vinculados a sus centros laborales; que el 50% de ellos son delegados a las asambleas municipales del Poder Popular, y que el Ejecutivo no puede disolver la Asamblea Nacional ni vetar las leyes que apruebe el máximo órgano legislativo.
Trece participantes en esta audiencia se refirieron al contenido de
las ponencias presentadas, entre ellos el doctor Armando Hart Dávalos, director del programa martiano de Cuba, quien ponderó el movimiento de masas que existe en la Mayor de las Antillas en torno a sus procesos electorales, pues, precisó, no hay país en el mundo que tenga la tradición jurídica de la nación cubana.
Propuso la realización de un programa de debate en el país para profundizar en el contenido de la Constitución de la República y su carácter socialista, y contrapuso el respeto al tema jurídico y a la ética que mantiene Cuba con la práctica del gobierno norteamericano acerca del caso de los cinco cubanos injustamente encarcelados en Estados Unidos por luchar contra el terrorismo; el tratamiento al caso del connotado criminal Luis Posada Carrilles, autor de la voladura de un avión civil en 1976 en el que perecieron 73 personas inocentes, y el tema de los inmigrantes, todo lo cual es inmoral e ilegal.
Entre otras sugerencias expuestas por los participantes estuvo la de incluir en el sistema de enseñanza del país el estudio de la Constitución y otros elementos del sistema político cubano.