Por Abel Prieto
Este libro que presentamos hoy, Enemigo de Raúl Capote, va a ser muy útil. Le hice una relectura rápida en las pocas horas libres que he tenido en estos días y ratifiqué precisamente eso: su utilidad en medio de los desafíos que tenemos los cubanos por delante en el campo de las ideas, un tipo de desafío muy complejo, muy difícil, donde, junto al compromiso revolucionario de la gente, hace falta mucha preparación, mucha información, mucha inteligencia, donde hay que evitar las ingenuidades y las respuestas primitivas, simplistas, y estar muy atentos a los proyectos que de manera incesante preparan nuestros enemigos en su afán, como dijo Capote en una entrevista con Aday del Sol que salió ayer en Juventud Rebelde, “de quebrar primero y robar después el alma de este pueblo”.