La congresista cubanoamericana Ileana
Ros-Lehtinen acaba de declarar su apoyo a un cambio en la Ley de Ajuste
Cubano, CAA (Cuban Adjust Act, por sus siglas en inglés), uno de los
instrumentos fundamentales en la política de EE.UU. contra Cuba.
A primera vista, pudiera parecer que la
representante a la Cámara por el Sur de la Florida, célebre por su
hostilidad hacia el gobierno de La Habana, coincide con la denuncia
cubana del carácter asesino de una legislación que iguala inmigrantes
legales e ilegales y ha llevado a la
muerte a no pocas personas que por propia iniciativa o en manos de
traficantes sin escrúpulos se han lanzado al mar en busca de ventajas
migratorias sólo existentes para los nacidos en la Isla.