Los mercados y bodegas de la Isla de la Juventud expenden desde hace unos días la leche saborizada de soya, nuevo alimento que ayuda a enriquecer la dieta.
El producto, como todos, ha tenido defensores y detractores, pero lo más importante es que se venden las más de 5 000 bolsas producidas en el día por los trabajadores de la empresa de productos lácteos Cristóbal Labra, ubicada en La Fe, segunda ciudad en importancia de esta ínsula.
Según explican los especialistas de ese centro, constituye un excelente alimento para cualquier edad, ya que su formulación principal es a base de leche de soya mezclada con sirope de chocolate muy gustado por la grey infantil y hasta por los que peinamos algunas canas. Después de varios años de estudios y pruebas en diferentes sitios de la geografía cubana, por parte de especialistas del Instituto de Investigaciones de la Industria Alimenticia de Cuba, se generaliza su producción en casi todas las provincias.
Otro de los atributos que se le suman a la leche saborizada de soya es que sus componentes, tanto la leche como el chocolate son de origen vegetal, muy convenientes para mantener la salud.
Los productores expresan que su forma de preparación para el consumo es opcional, pudiera calentarse o hervirse, pero se recomienda ingerir frío, pues en su paso por el fuego el alimento pierde propiedades, además advierten que la conservación de este preciado alimento tiene que ser bajo refrigeración, por hasta tres días.
La obesidad, la hipertensión, la diabetes, los problemas circulatorios, entre otros, señorean en las edades medias, por lo que sería conveniente hacerle más la corte a la leche saborizada convencidos de que los estudios realizados desde 1967 señalan que las proteínas de la soya reducen los triglicéridos y el colesterol y es ideal en las dietas vegetarias y para quienes temen estar pasados de peso.
En algunas búsquedas sobre este tema he podido conocer que estudios médicos validan que su consumo habitual detiene el crecimiento de células cancerígenas, mejora la digestión, combate el estreñimiento y la osteoporosis. Se recomienda su ingestión a pacientes diabéticos.
Al ingerir de forma controlada este alimento, estoy seguro de que ayudará a mejorar la salud cardiovascular, previniendo la aparición de enfermedades del corazón o el desarrollo del cáncer.