La derecha venezolana no se cansa de
buscar la forma de destruir la revolución bolivariana que lidera Hugo Chávez
Frías. Han tratado con el golpe de estado, con el paro petrolero, con la
enfermedad del presidente, con el boicot, con las conspiraciones, con las
especulaciones, las campañas mediáticas y más de una decena de veces en los
colegios electorales. No pueden con el Comandante Chávez y su revolución y se
llenan de frustraciones, de odios y de sed de venganza.
Afirman que en Venezuela no hay
democracia, pero acuden a todas las elecciones con la esperanza de ganar el
poder político; que hay una dictadura y sin embargo no se cansan de convocar a
sus partidarios a protestar en las calles; que no existe la libertad de prensa y
se pasan la vida en campañas difamatorias en contra del gobierno, sin que nada
les pase.