No pretendo dar un disertación bíblica
ni profundizar en los argumentos del primer libro de la Biblia. Solo pretendo
llenar de felicidad a mi nietecita nombrada Génesis Quiroz Rivero que
hoy 15 de octubre arriba a su primera década de vida.
Hoy me dedicaré a caracterizarla
como digno reconocimiento a sus valores.
Esta nena muy bella de auténtico
y original proceder, vino al mundo para repartir amor, felicidad y confianza. Con
una alta dosis de responsabilidad y simpatía innatas que cultiva día a día
repartiéndolas por doquier a sus semejantes que la adoramos por sus bondades.