Por
Sergio I. Rivero Carrasco
Fue
el 5 de marzo de 1933 cuando falleció Juan Gualberto Gómez Ferrer en La Habana,
cuando aún no había cumplido los 79 años de edad. Sus raíces esclavas le
llegaban por sus padres, quienes
pertenecieron a la dotación del ingenio “Vellocino”, en Sabana del Comendador,
Matanzas, donde él también vio la luz. Con enormes esfuerzos personales sus
padres pudieron comprar, su libertad desde que crecía feliz en el vientre
materno, quienes también adquirieron las cartas de libertad de su Juan.