INVADE LA MENTIRA Y COMIENZA ASESINANDO A LA VERDAD

Comenzaré diciendo que, aunque pareciera surrealista, del Imperio ya no me extraña nada. Lo cual considero, autocríticamente, creo volatizó mi capacidad de espanto. Ni del pasado, presente o futuro que, cambiando las formas, pudiera producir los mismos genocidios y dejar idénticas secuelas físicas, emocionales y psíquicas en poblaciones de las cuales intentan desechar su cultura, destruir su patrimonio, y “sembrar” todo el daño posible para las generaciones venideras.

No lo hacen por instinto de supervivencia, o porque vean a esta en riesgo, sino por consolidar su capacidad de un ínfimo sector financiero, parásito, porque no participa en la producción, sino que hace el dinero a partir de “apuestas” en Bolsa para procurar más dinero. La evaluación costo–beneficio, es secundaria; si da ganancia es para ellos permanecer especulando, si da pérdida se “descarga” en los sectores que los apoyan, creyendo sin ellos no pueden sobrevivir.

No existe, en la práctica el vínculo PBI, redistribución, producción para abastecer el Mercado Interno, y un excedente para intercambiar en buenos y justos términos.

Sin embargo, lo que más me preocupa no es profundizar en el análisis del enemigo de todos los pueblos, sino en nuestras propias debilidades ideológicas, políticas y organizativas. Las que vemos, escuchamos, repetimos sin profundizar el análisis, a diario. 

Para intentar “interpretar” los innumerables conflictos existentes de ayer, hoy y mañana, usamos Categorías, terminología, fraseología, formas de enfoque, conclusiones, sacadas de la alienación proporcionada por el enemigo. Anteponemos la OPINIÓN al HECHO MISMO; en vez de dar la noticia del hecho, verificando su autenticidad, sin nada de ello ya articulamos opinando al respecto. Grave falencia.

La falta de Formación Política para y desde nuestros métodos de análisis es desesperantemente notoria. Oímos del Presidente libio, del Dictador porque hace 42 años está en el Poder, de no escuchar a “los rebeldes” de su pueblo, del avance que estos hacen como justo reclamo, de la democratización necesaria de Libia y salvar su población civil de las matanzas… Sirtre hoy tiene un alerta sanitario por la inmensa cantidad de cadáveres putrefactos...

Libia es el nombre que dieron los africanos, hasta entonces conocida, y de manera muy particular a la costa africana del Mediterráneo, donde estratégicamente el puerto era muy importante.

Las primeras menciones que aparecen de Libia, en la historia, se refieren a los guerreros libios contratados como mercenarios por el Antiguo Egipto, en el primer milenio antes de la Era común. En el 643, la zona cayó bajo el dominio de los árabes. Posteriormente el territorio pasó a formar parte, con una relación más o menos estrecha, del Imperio Otomano (Siglo XVI).El idioma y la cultura árabes borraron la cultura romana, cuyo Imperio la anexionó organizando Tripolitania (tres ciudades), como una Provincia.

En 1912 se convirtió en una colonia italiana.

Muammar al-Gaddafi

El 1º de septiembre de 1969, el a la izquierda del ejército, encabeza la denominada “Revolución Verde” y derroca la monarquía del Rey Idris. Inició en Sebba una insurrección. Se instaura un Consejo Militar Revolucionario, precedido por ese joven y desconocido oficial, el coronel Gaddafi, que nombra un nuevo gobierno, en 1970.

En el transcurso de los meses siguientes, la Banca es seminacionalizada (el Estado se reserva un 51% de las acciones), se promulga una Constitución Provisional, se exige la retirada de las bases militares que Gran Bretaña y los Estados Unidos tenían en el territorio. De inmediato instaura un Consejo de la Revolución que declara al país musulmán, nasserista y socialista.

Dice: “En el mundo actual, la totalidad de los regímenes políticos son el resultado de la lucha que libran los distintos sistemas de gobierno para alcanzar el poder, ya sea esta lucha pacifica o armada, como luchas de clases, de sectas, de tribus, de partidos o individuos, se liquida siempre por el éxito de uno de esos sistemas, individuo, grupo, partido o clase y por la derrota del pueblo, en consecuencia, la derrota de la verdadera democracia”
Gaddafi se ganaría el odio imperial al eliminar las bases militares norteamericanas e inglesas e imponer limitaciones a unas 60 firmas transnacionales petroleras en el país. Así como declaró que el estado libio asumiría el control de la producción de petróleo.

La Revolución Verde emprendió: reforma agraria, sistema de seguridad social, asistencia médica gratuita, participación de los trabajadores en las ganancias de las empresas del Estado. Libia se convirtió, con Gaddafi, en el país africano con mayor ingreso per cápita.

Veamos algunas ideas del Libro Verde guía de la revolución libia:
“El partido representa sólo a una fracción del pueblo, mientras que la soberanía popular es indivisible.”; los Congresos Populares son la expresión máxima de la democracia directa”.

“La solución definitiva consiste en la supresión del lucro. Pero, como quiera que el lucro constituya el motor del proceso económico, su supresión no puede producirse por decreto, sino que habrá de ser consecuencia socialista que, al realizarse, logra la satisfacción de las necesidades de la sociedad y de los individuos”.

Gaddafi implantó un régimen de gobierno de orientación socialista conocido como Jamahiriya. Hombre de origen humilde (beduino), era ferviente admirador de Gamal Abdel Nasser, el líder egipcio con el que, tras la toma del poder, entabló una estrecha amistad. 

Ambos líderes profesaban el ideal del panarabismo y muy pronto se pusieron a la tarea de construir la gran nación árabe. Pero Nasser murió cuando la labor apenas comenzaba. Sin embargo Gaddafi logró crear alianzas con Egipto y Siria, que llevaron a la creación de una efímera Federación entre estos tres estados, que buscaba ser el germen de la unión definitiva del mundo árabe musulmán.

En 1970, bajo amenaza de retirar la licencia a varias compañías que explotaban dicho recurso en su país, Gaddafi consiguió establecer los precios del petróleo que Libia consideraba justos, acabando así con la tradicional política según la cual eran las empresas multinacionales las que fijaban los precios que pagaban a los Estados donde realizaban las explotaciones. De esta manera, Gaddafi descubre para el mundo árabe su potencial como potencia en la geopolítica mundial. La situación generaría la crisis energética de los años setenta, provocada por el boicot de los países petroleros a Occidente, en respuesta a su respaldo a Israel y, más adelante, sería la base con la que se creó la OPEP. En agosto de 1973 nacionalizó el 51% del capital de todas las compañías extranjeras.

La primera acción de ofensiva militar de EE. UU. fué el bombardeo a Libia en las ciudades de Trípoli y Bengasi, el 15 de abril de 1986, ordenado por Reagan. En enero de 1992, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó la Resolución 731 y dos meses después la 748, que establecía un bloqueo aéreo total contra Libia y embargo de armas, en tanto no se cumpliera aquella Resolución.    

    

Debemos aprender que es un Líder porque ese es el nombre que le dan las distintas tribus, cuando lo eligen, que los años de permanencia en un cargo no “hacen” a un Dictador, sino la capacidad de respuesta a las necesidades de ese pueblo, que lo sostiene, y sus formas de concretarlo, que “Libia” es una abreviatura de GRAN YAMAHIRÍA ÁRABE LIBIA POPULAR SOCIALISTA, que no se apoderó del cargo con un “Golpe de Estado” sino al frente de una insurrección popular para el claro beneficio de todo el pueblo, que implementó una Revolución, que desestabilizaron al país balcanizándolo al profundizar conflictos tribales que siempre ellos resolvieron, con la economía e injerencia de todo tipo, que los “rebeldes” eran en su mayoría mercenarios de otros países pertrechados por “grupos especiales” primero, y la OTAN después, que llegaron hasta Trípoli porque la OTAN les abría camino porque solos jamás lo hubiesen hecho, que la triunfalista “toma de Trípoli” fue filmada días antes en Qatar… A raíz de todo ello asumir otra derrota de un pueblo que ha quedado con uranio empobrecido en su tierra y agua, lo cual acarreará problemas de salud severos sobre todo a los niños actuales y los que nacerán.    

  

Un metódico trabajo de Inteligencia anterior, de largo plazo, instaló el optimismo triunfalista de algunos disidentes a los que se sumaron cientos de mercenarios de otros países, incluso de Colombia, a los que se pertrechó con armas y se le abrió camino por tierra y apoyo aéreo, sin dejar fuera de los bombardeos más que al petróleo y el agua. TODO LO DEMÁS ERAN BLANCOS DE GUERRA y daños colaterales.

Un país con salud y educación gratuita, con un ingreso per cápita casi europeo, solidario con varios otros países, ha sido arruinado, casi aniquilado, y hemos asistido al proceso modificando apenas el conocimiento que sobre él teníamos. Ahora nos preocupa porque no sabemos dónde atacarán. El triunfalismo del Imperio, vergonzante, con todo lo que dejó caer sobre ese pueblo, ya habla de “reconstrucción” (anoche estaba Obama en la CNN diciendo los miles de millones que tenían dispuesto para ello) y, LA REALIDAD, dura, cruel, infame, es que NUNCA han reconstruído nada, ni en su propio suelo. Podemos nosotros usar ese término, en un análisis realista ?

En las Dictaduras latinoamericanas se suspendió el estudio en las Facultades de Ciencias Sociales y de la Comunicación o, como en Argentina, se reabrieron bajo el Decanato del Arzobispado, lo cual sólo prueba dos cosas: la complicidad de éste con la Dictadura más cruel (avalada por el Imperio y su Plan Cóndor) y el que los Periodistas de hoy en día, a cuarenta años, tengan esa “desformación” académica. Da una razón, no justifica.

Las crisis aceleran los procesos y, América Latina y el Caribe, están transitando la formación de Organismos propios, saltando dificultades múltiples que hacen a las particularidades de cada uno, para enfrentar lo que para algunos es un hecho. Una intervención en nuestra Patria Grande. Sin embargo siento que se manifiesta como hecho consumado, sin considerar el poder evitarlo, fatalistamente. No comparto.

Las Bases Militares, la Escuelas de las Américas, la injerencia de las Embajadas en asuntos internos de cada país, el entrenamiento que dan a nuestras tropas de distintas armas, el sostener el dólar como moneda “fuerte” de intercambio, es algo que debiera ya irse viendo las formas de erradicar. Sale más barato prevenir que curar.

La Organizaciones como UNASUR, Banco del SUR, Milicias, fraternidad consolidada de los pueblos, traspasar fronteras con intercambio de todo tipo, en forma equitativa, debe ser una Superestructura agilizada, pero acorde a una Base (Modo de Producción y Relaciones Laborales). Aún hablamos de extranjerización, explotación de recursos naturales donde el Imperio se lleva todo y nos devuelve su manufactura a precio inaccesible ( de qué siglo?), del ecosistema, del agua, como temas a futuro…

Debemos ya comenzar a industrializar países, defender soberanía, evitar cualquier tipo de injerencia o chantaje (en lobby “negociación” ), amar nuestra tierra y todo lo que contiene, fruto de antiguos y consecuentes saqueos imperiales, con un nacionalismo sano hacia la unidad, con una vía clara al Socialismo no predicado sino practicado. Nada convence más y motiva el subjetivo de lucha que los hechos concretos. Buscar nuestra identidad de conquistados y colonizados y decir BASTA !

No podemos analizar, y menos juzgar, otras realidades y culturas, desde la óptica latinoamericana o europea, debemos esforzarnos en ponernos en el lugar del otro... 

No descansemos en algunos Presidentes Socialistas, progresistas, de nacionalismo sano, sino en los pueblos, en nosotros y nuestros actos cotidianos. Para ello, primero, abandonemos el uso de fraseología imperial en las voces o palabras de los compañeros, intensifiquemos nuestra revolución interna, formémonos solos y con el otro, acerquemos, en un mundo globalizado, otras realidades para interpretarlas cabalmente y aportar.

Qué ganaremos con ello ? AHORRAR TIEMPO Y SALVAGUARDAR EL MEJOR DE LOS RECURSOS: EL HUMANO !