domingo, agosto 18, 2013

¿Qué sabe realmente la NSA? ¿Por qué te tiene miedo?

Un parlamentario brasileño exhibe una máscara en solidaridad con Edward Snowden
Un parlamentario brasileño exhibe una máscara en solidaridad
con Edward Snowden. Foto: www.michelcollon.info

“La NSA ‘solo’ vigila el 1,6% del tráfico en Internet”, acaba de declarar la agencia norteamericana. Entonces, ¿no es para tanto ? ¿Aliviados ? Cuidado… De hecho, la Red transporta 1.826 peta bytes al día. Pero el 62% del tráfico son los medios de comunicación y el entretenimiento. Y si deducimos además las descargas (ilegales o no) entonces la Red es solamente el 11,9%. Ahora bien, al menos dos tercios de los emails son spams. Resumiendo, según las estadísticas de los Estados Unidos, la NSA se interesa por el 2,9% del tráfico. Así que lo que espía es prácticamente todo.

Y nos toma por imbéciles. Si Google dice indexar el 0,0004 de los datos en la Red, así pues la NSA representa…400 Google. Y 126 Facebook.


La pregunta es: ¿por qué se nos espía tan masivamente ? Y la respuesta la dio el mismo Edward Snowden, en su declaración del 1 de julio (que los medios han silenciado, concentrándose en el suspense de la ‘caza’ al hombre):
Sin la menor decisión judicial, ahora lo que la administración quiere es impedir que ejerza un derecho fundamental. Un derecho que nos pertenece a todos. El derecho de pedir asilo. De hecho, la administración Obama no tiene miedo a los que lanzan las alarmas como yo, Bradley Manning o Thomas Drake. Nosotros somos apátridas, prisioneros o impotentes. No, la administración Obama le tiene miedo a ustedes. Le tiene miedo a un público informado y encolerizado que exija el gobierno constitucional que se le prometió- y el que tendría que ser. Mis convicciones siguen intactas y me maravillan los esfuerzos desplegados por tantas personas.
Obama y aquellos que le dirigen le tiene miedo a usted. Tienen miedo de que al estar informado, tú rechaces las injusticias, los pillajes y las guerras. Tú -nosotros- tienes mucho más poder de lo que crees.

(Tomado del blog de Michel Collon)

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