Los jóvenes de ETECSA agasajan a su Delegado Directo |
Por Sergio Rivero Carrasco
Fotos y video: Gerardo Mayet Cruz y Alexis Rúa Pérez
Hoy fue un día especial para los jóvenes de la División Territorial de ETECSA en la Isla de la Juventud. Muchos años de ardua labor con los bisoños trabajadores, innumerables aportes a la economía, la calidad de los servicios, la profesionalidad en la atención a los clientes y la eficiencia en los servicios, hicieron posible que ese colectivo fuera seleccionado para elegir entre su masa juvenil, al Delegado Directo por la Isla de la Juventud, al XVIII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes a celebrarse en Ecuador en el mes de diciembre del presente año.
Después de un limpio proceso democrático que abarcó a todos los departamentos y direcciones de la Institución en acciones grupales que se iniciaron a las ocho de la mañana, hicieron posible que la aplastante mayoría de los integrantes de este colectivo juvenil viera su máximo exponente en un joven que acumula una excelente carrera revolucionaria, estudiantil y laboral: Francisco Pérez Jiménez, Pancho para sus compañeros de labor.
Pancho muestra el certificado de Delegado Directo |
El joven Ingeniero Mecánico guarda especiales recuerdos de su vida pioneril cuando integró la delegación de la Isla de la Juventud en el Primer Congreso de la Organización de Pioneros José Martí, las tareas de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media (FEEM) y de la FEU en las que ocupó diferentes responsabilidades con buenos resultados. "Fue una época hermosa en nuestras vidas. Es bonito sentir que tus compañeros confían en tí para ayudarlos en la solución de sus problemas".
Muy emocionado este sencillo y campechano joven, manifiesta que es un honor haber sido elegido Delegado Directo al XVIII Festival, y agregó: "Es un orgullo muy grande estar entre los jovenes que iremos a representar al pais, y para mi es doble la satisfacción, pues salgo desde mi Isla querida con esa responsabilidad".
El calor humano crecía a la par del día, que de un cielo ocupado por el gris de las nubes al amanecer, supo dar paso progresivo a la luz del sol con su brillante resplandor anunciando también que Pancho iba de la Isla a Ecuador, como máximo representante de este grupo etáreo renovador, intransigente y lleno de virtudes forjados por la Revolución cubana.
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