Sergio I. Rivero Carrasco
Parece
que fue ayer y ya han pasado 42 años desde que aquel ocho de diciembre de 1977
naciera el Teatro Juvenil Pinos Nuevos en su sede fundacional del campamento
“La Sacra”, proyecto cultor desde sus orígenes de una estética muy
revolucionaria por esos años que se le llamó Movimiento de Teatro Nuevo, con la
influencia del Teatro Escambray dirigido por Sergio Corrieri y Gilda Hernández,
pero con la diferencia de que sus investigaciones e historias para sus propuestas
teatrales brotaban de las propias escuelas en el campo que poblaban la Isla.
Fueron
12 jóvenes los que llegaron aquí con experiencias anteriores aquí, durante su
período Escuela al Campo mientras cursaban la especialidad de teatro en la
Escuela Nacional de Arte. Ahora bajo la
Dirección General de Iván Pérez Carrión, asumieron otras metas y aspiraciones profesionales
que los llevó a desarrollar un
movimiento teatral digno de lo mejor que se producía en el país por esos años,
por lo cual en 1981 le fue otorgada a la Isla la sede del Primer Festival
Nacional de Teatro Nuevo, encuentro importantísimo que también abrió un camino
para penetrar más en la vida de las escuelas. Para la inauguración de ese evento
teatral se estrenó una de las obras insignes: “El Compás de Madera” de
Francisco Fonseca, en el Instituto Pre-Universitario en el Campo José Maceo
Grajales.
Las
historias de vida no se hicieron esperar y después del proyecto inicial “Pequeño
homenaje a Martí” dedicado al Apóstol y estrenado en la Casa Museo Finca el
Abra el 28 de enero del siguiente año en el 125 aniversario de su natalicio,
los integrantes del grupo diseñaron un sistema de investigación en las escuelas
teniendo como temas los intereses de los estudiantes, las problemáticas más
generalizadas en la vida de las escuelas, entre otras, para crear una
dramaturgia propia y emprender marcha a los sitios de origen para debatirlas
con los estudiantes y profesores tratando de sacar de ellas el mejor provecho.
Puestas en escena como “Cada cosa en su lugar”, “Primera
y palante”, “Qué el mundo se caiga”, “Que vivan los estudiantes”, “El grito en
el cielo”, “Molinos de viento”, “El compás de madera” y “Proyecto de amor”,
nacieron del talento creador de sus actores y directores, devenidos investigadores
y guionistas, lo cual les permitió crecer como profesionales y seres humanos.
Más
tarde, el proyecto se fue transformando al producirse algunos cambios en el
sistema de escuelas en el campo que fueron su laboratorio inicial; algunos
actores retornaron a sus provincias de origen y otros fundadores quedaron aquí con
mucho entusiasmo perdurando a este colectivo y al teatro pinero hasta nuestros
días como Israel Martínez y Francisco Fonseca.
Miguel
Leoncio Olaechea, recién graduado en la Universidad de las Artes, ingresa en el
grupo como actor a finales de los 80’ y a inicios de los 90´ toma sus riendas y
se convierte en su Director artístico. Con su visión renovadora le imprime una
nueva dinámica y estética que se ha mantenido hasta hoy, con el abordaje de
temas cubanos y foráneos, contando a su haber casi una veintena de puestas en
escena enriquecedoras del quehacer teatral, con un estilo más depurado y
maduro, donde el lenguaje gestual, el espacio y la palabra definen en su esencia
la línea estética y estilística del colectivo.
En los
más de 27 años de conducción y creación constante de Olaechea, el colectivo ha
emprendido grandes producciones como “Muerte por agua” y “Caricias”, también
producidas como audiovisuales por el Canal Territorial Islavisión; la primera,
ganadora del Gran Premio en Festival Nacional de Telecentros junto a otros
siete premios de especialidades. En su quehacer las acompañan “Contigo pan y
cebolla”, “Lala o ¿con qué martirio tiene que vivir una?”, “Vacas”, “El
acompañante”…, y se disponen a estrenar el ocho de diciembre a las nueve de la
noche la divertida comedia de enredos “Contrólate Manolo, contrólate”, con
guión y dirección del propio Olaechea.
Las
palmas una vez más para Bertha, Olaechea, Lucía, Delvis, Israel, Giskly, Emely,
Caicedo, Laida, Yuslaidys, Beatriz, Alex, Francis y demás integrantes de la
familia de Pinos Nuevos en su cumpleaños 42, fiesta que preparan junto a muchos
amigos desde hace varios meses mientras dejan a punto su nueva puesta en escena
para el estreno este domingo, listos para picar el pastel cuando logren
“controlar a Manolo”.
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