Por Sergio Rivero Carrasco
Cada año la UNEAC de la Isla de la Juventud se prepara para
agasajar a los artistas que en el transcurso de sus vidas dejaron una impronta
en este territorio insular y aunque el tiempo ha pasado y muchos eran muy
jóvenes, el reencuentro con los amigos, el encuentro no planificado con
personas guardadas en sus pechos aunque por muchos años no se hayan comunicado,
o simplemente el recuerdo más sencillo y agradecido por intercambiar miradas,
sentir que en el fondo de sus pupilas todavía late el sentimiento que antaño
vibró.
Hoy esas iluminaciones del espíritu se dieron cita en la
sala polivalente de la UNEAC en Nueva Gerona cuando el cantaautor Alberto Tosca, el viejo
radialista Mazorra, Víctor Cordero, que parecía pintar con sus “chorongos” y el escritor Jorge Ángel
Hernández, intercambiaron con la prensa en presencia de los amigos de todos los
tiempos que se acercaron allí para admirarlos, dejando inaugurado así este evento anual que une voluntades y alimenta el espíritu.