El vicepresidente cubano Carlos Lage denunció hoy la doble moral de Estados Unidos en materia migratoria, la falta de voluntad política del mundo desarrollado e instó a Latinoamérica a luchar por sus derechos.
Al intervenir en la sesión de Jefes de Estado y de Gobierno de la XVI Cumbre Iberoamericana, Lage advirtió que Washington mantiene una política durante decenios cuyo propósito es provocar un éxodo masivo, como pretexto de una campaña contra la isla y hasta de una agresión militar.
Si un latinoamericano va a vivir a Estados Unidos es un inmigrante mientras un cubano recibe el calificativo de exiliado político fugado del régimen comunista, acotó.
Un latino emigrado ilegal es devuelto, pero si es un cubano, una vez en Estados Unidos, en virtud de la Ley de Ajuste, obtiene de inmediato permiso de residencia y de trabajo, y al año, automáticamente, recibe la residencia permanente.
La administración Bush -precisó- suspendió las conversaciones migratorias, limitó las remesas a 300 dólares trimestrales y restringió los viajes a la isla de cubanos emigrados a solo una vez cada tres años, solo para abuelos, hijos o nietos y hermanos.
Al mismo tiempo, puntualizó el vicepresidente, el gobierno de Estados Unidos brinda refugio y extiende impunidad en su territorio a elementos terroristas que han asesinado y secuestrado barcos y aviones para emigrar.
Asimismo, restringe la emigración legal y estimula la ilegal para usarla como propaganda, aunque mueran, quién sabe cuántos, en las aguas del Estrecho de la Florida.
Mientras tanto, un plan financiado por Washington pretende captar médicos y otros especialistas de la salud cubanos que prestan importantes servicios en el extranjero, sostuvo el jefe de la delegación del país caribeño a la magna cita de Iberoamérica.
El muro en la frontera con México y las cacerías de emigrantes que allí tienen lugar, son una prueba, si es que se requería alguna, del desprecio de los poderosos por todos los que no lo son, aun si esos gobiernos son sus aliados.
Lage manifestó que la adopción por los países ricos de medidas cada vez mas restrictivas, abusivas y xenófobas es moralmente inaceptable.
Asimismo, propuso demandar una indemnización por no menos de cinco mil millones de dólares por los casi 240 mil médicos, informáticos, maestros y otros profesionales de América Latina estimulados a migrar con todas las facilidades, para quienes no existen los muros.
Los emigrados cuyos derechos hoy justamente defendemos son consecuencia del saqueo, la explotación y la desigual distribución de la riqueza. Nada detendrá este fenómeno mientras haya subdesarrollo y pobreza, mientras se impongan a los países del Sur las actuales políticas económicas neoliberales.
Hay una verdad que quiero decir sin rodeos, enfatizó antes de asegurar que en la mayor parte de los estados desarrollados no existe voluntad política, ni interés económico ni humano para cambiar esta situación.
Los Objetivos y Metas del Milenio no se van a cumplir, el mundo desarrollado no ha tenido siquiera la intención de hacer el mínimo esfuerzo financiero y miles de millones de personas viven aun sin acceso a la alimentación, la salud o la educación.
El gasto en armas y en guerras supera ya el millón de millones de dólares, otro billón se gasta en publicidad comercial, la deuda no acaba de ser cancelada y la ayuda al desarrollo es cada vez mas condicionada.
Estados Unidos, que tanto dependió y depende de los emigrantes para su desarrollo económico, y la Unión Europea, que siempre fue un emisor de emigrantes, son ahora los mayores perseguidores de emigrantes del mundo.
El libre intercambio de mercancías que se impone y el exigido libre flujo de capitales son una trampa si no están acompañados del libre transito de personas, dijo Lage ante los dignatarios asistentes a la sesión plenaria en el hotel Radisson de la capital uruguaya.
Con Cuba, bloqueada y agredida, pero jamás rendida, los países latinoamericanos podrán contar siempre para luchar por nuestros derechos que, sabemos bien, no nos serán regalados, y enumeró algunos de los programas de cooperación que brinda la isla.
La Operación Milagro en apenas dos años ha devuelto la visión a más de 450 mil personas en América Latina y el Caribe y esos servicios han sido todos gratuitos, con la posibilidad de operar a un millón de personas cada año.
Las nuevas concepciones aplicadas en la formación masiva de médicos de Latinoamérica y de otros continentes, permitirá disponer en muy poco tiempo de más de 10 mil médicos anualmente, no para ejercer la medicina privada, sino para llevar salud y vida a millones de personas.
La cooperación en la esfera de la salud permite hoy a Cuba, y cada vez más a Bolivia y Venezuela, garantizar a todos sus hijos sin excepción una atención medica gratuita y de excelencia.
El vicepresidente recordó que dos millones 400 mil latinoamericanos han sido alfabetizados en 11 países y miles de especialistas cubanos trabajan como instructores deportivos.