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miércoles, octubre 16, 2013
domingo, enero 06, 2013
La ruta de Cuba es inequívoca
Por Manuel E. Yepe*
Me decía un ciudadano norteamericano
simpatizante de la revolución cubana de visita en La Habana que él tenía la
impresión de que los cubanos estaban engañando al mundo fingiendo, con algunas
de las reformas que se estaban adoptando, un giro hacia el capitalismo cuando en
verdad lo que se proponen es seguir avanzando hacia el
socialismo.
Le aclaré que el Presidente
cubano Raúl Castro ha declarado reiteradamente que “todo cuanto hacemos va
dirigido a la preservación y desarrollo en Cuba de una sociedad socialista
sustentable y próspera". Las campañas contra Cuba que promueve Washington son
las que utilizan el sofisma de que la Isla gira al capitalismo para sustentar su
reclamo de que el socialismo ha fracasado.
domingo, diciembre 30, 2012
Economía cubana: Entre lo inalcanzable y lo inaplazable
- Si miramos hacia atrás observamos que la continuación de los cambios y flexibilizaciones de lo que denominamos actualización del modelo económico no genera aún saltos espectaculares, pero va creando los cimientos para el vuelco decisivo
Por José Alejandro Rodríguez
Tomado de Juventude Rebelde
Tomado de Juventude Rebelde
Son muy complejas, pero no murallas infranqueables, las
coordenadas externas y domésticas en las que la economía cubana transita
de 2012 a 2013, con algunos respiros y también con insatisfacciones.
Si miramos hacia atrás el año que expira, observamos que la
continuación de los cambios y flexibilizaciones de lo que denominamos
«actualización del modelo económico», no genera aún, por inacabados,
saltos espectaculares ni todos los frutos tangibles que esperamos. Pero
va creando los cimientos para el vuelco decisivo hacia aquello que el
Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros Raúl Castro
calificara ante el Parlamento como gran objetivo: la preservación y
desarrollo en Cuba de una sociedad socialista sustentable y próspera.
miércoles, diciembre 26, 2012
2012: Otro año de cambios en Cuba
Tomado de Cambios en Cuba
Cuba termina un año en el que el país caribeño ha vivido profundas
transformaciones, como parte del programa que impulsa el presidente Raúl
Castro de actualización del modelo económico.
En enero sesionó la Primera Conferencia del Partido Comunista de Cuba (PCC), una reunión que concluyó con un llamado del presidente Castro a combatir la corrupción y el anuncio de la decisión de limitar a diez años el tiempo para ejercer los cargos gubernamentales y partidistas.
En enero sesionó la Primera Conferencia del Partido Comunista de Cuba (PCC), una reunión que concluyó con un llamado del presidente Castro a combatir la corrupción y el anuncio de la decisión de limitar a diez años el tiempo para ejercer los cargos gubernamentales y partidistas.
miércoles, octubre 03, 2012
Consejo de Ministros cubano analiza avance de cambios económicos y sociales
Tomado de Islamía
El presidente cubano, Raúl Castro, repasó en Consejo de Ministros los avances de la actualización del modelo económico en la Isla donde dio a conocer que unos 5 mil trabajadores privados en la Isla han optado por el sistema de arrendamiento de locales estatales para sus negocios, informó este martes el diario Granma.
Según el rotativo, durante esta reunión celebrada el pasado viernes, la ministra de Comercio Interior, Mari Blanca Ortega, informó que esos trabajadores están vinculados a 51 actividades de las autorizadas para realizar por cuenta propia, como se conoce en Cuba el empleo privado.
lunes, marzo 16, 2009
TIEMPOS DE CAMBIOS
La palabra cambio se ha hecho muy popular dentro de las más diversas organizaciones y se ha convertido en un protagonista del quehacer empresarial en el mundo. Los últimos tiempos parecen indicar que quien no se adapte al cambio morirá en el camino.
Los especialistas coinciden en señalar que los referidos cambios organizacionales no deben dejarse al azar, ni a la inercia de la costumbre, mucho menos a la improvisación, estos deben planificarse adecuadamente como una forma de asegurarse de que los resultados del mismo serán en beneficio de la organización o sociedad que los promueva.
Tan vertiginosas son las transformaciones en el mundo actual que algo que sea único o sólido hoy, el día de mañana sea sorpresivamente diferente y obligue dialécticamente a rápidos ajustes.
Un aspecto estratégico decisivo del futuro de América Latina y el Caribe son los cambios que están teniendo lugar en pos de la integración, por supuesto, no como apéndice subordinado a Estados Unidos, sino la integración de América Latina y el Caribe consigo misma.
Según Oswaldo Martínez, Director del Centro de Estudios de la Economía Mundial en Cuba, “Lo que ha primado en la integración latinoamericana durante décadas ha sido la retórica y no la práctica. Ahora estamos asistiendo a los inicios de un nuevo momento marcado especialmente por la Cumbre de Salvador de Bahía, efectuada en diciembre pasado, y en la que Cuba ingresó al Grupo de Río. También tenemos la Alternativa Bolivariana para las Américas, un nuevo modelo integración basado en la solidaridad y la cooperación, no en el mercado.
“Esta situación coincide con la gran crisis que obliga a América Latina a repensar toda su inserción en la economía mundial. Coincide además con la profunda crisis de la política neoliberal que determinó todo en América Latina en los últimos 30 años. Es un gran momento, y hay un razonable grado de posibilidad de que la verdadera integración latinoamericana y caribeña comience a dar pasos firmes.”
El cambio que se ha ido consolidando en esta área geográfica va más allá de unos resultados electorales concretos, y la fuerza social del proyecto del FMLN es, por sí misma, una demostración más de esa tendencia. En la medida que países como Bolivia y Ecuador se han ido sumando a los gobiernos revolucionarios o progresistas de Cuba, Venezuela, Brasil o Argentina se ha ido conformando un bloque regional que ha supuesto a su vez el declive de la hegemonía norteamericana en el considerado su «patio trasero». Si bien las diferencias entre proyectos y ritmos de esos gobiernos son evidentes, no cabe duda de que en todos esos casos la irrupción de las fuerzas progresistas ha supuesto un elemento positivo.
En algunos casos ese cambio ha llegado incluso a cuestionar las estructuras establecidas durante siglos de colonialismo y dominación, ofreciendo un modelo de desarrollo alternativo para sus países concretos, pero también para toda la zona.
Un proceso bien conducido de cambio implica lograr una transformación en los hombres que se involucran en los procesos de cambio, que hace que se esté más alerta, más flexible y para eso muchas veces tiene que iniciar un análisis de revisión interior y de autoconocimiento, como estimula la sociedad cubana en diversos procesos económicos y políticos a lo largo de la Revolución e incluso de su proceso histórico por parte de sus principales líderes revolucionarios para extraer las mejores enseñanzas.
“Si durante las décadas de los 70 y los 80 del pasado siglo, precisa Oswaldo, los movimientos insurgentes creados en las selvas latinoamericanas fueron un faro de esperanza para la izquierda mundial, ahora son los programas de gobierno de esos mismos movimientos los que reclaman la atención de quienes aspiran a un mundo más justo. Y reclaman esa atención no para ser reivindicados, juzgados o fiscalizados por sus camaradas occidentales. Simplemente dicen que América Latina resurge en sus brazos.”
Los especialistas coinciden en señalar que los referidos cambios organizacionales no deben dejarse al azar, ni a la inercia de la costumbre, mucho menos a la improvisación, estos deben planificarse adecuadamente como una forma de asegurarse de que los resultados del mismo serán en beneficio de la organización o sociedad que los promueva.
Tan vertiginosas son las transformaciones en el mundo actual que algo que sea único o sólido hoy, el día de mañana sea sorpresivamente diferente y obligue dialécticamente a rápidos ajustes.
Un aspecto estratégico decisivo del futuro de América Latina y el Caribe son los cambios que están teniendo lugar en pos de la integración, por supuesto, no como apéndice subordinado a Estados Unidos, sino la integración de América Latina y el Caribe consigo misma.
Según Oswaldo Martínez, Director del Centro de Estudios de la Economía Mundial en Cuba, “Lo que ha primado en la integración latinoamericana durante décadas ha sido la retórica y no la práctica. Ahora estamos asistiendo a los inicios de un nuevo momento marcado especialmente por la Cumbre de Salvador de Bahía, efectuada en diciembre pasado, y en la que Cuba ingresó al Grupo de Río. También tenemos la Alternativa Bolivariana para las Américas, un nuevo modelo integración basado en la solidaridad y la cooperación, no en el mercado.
“Esta situación coincide con la gran crisis que obliga a América Latina a repensar toda su inserción en la economía mundial. Coincide además con la profunda crisis de la política neoliberal que determinó todo en América Latina en los últimos 30 años. Es un gran momento, y hay un razonable grado de posibilidad de que la verdadera integración latinoamericana y caribeña comience a dar pasos firmes.”
El cambio que se ha ido consolidando en esta área geográfica va más allá de unos resultados electorales concretos, y la fuerza social del proyecto del FMLN es, por sí misma, una demostración más de esa tendencia. En la medida que países como Bolivia y Ecuador se han ido sumando a los gobiernos revolucionarios o progresistas de Cuba, Venezuela, Brasil o Argentina se ha ido conformando un bloque regional que ha supuesto a su vez el declive de la hegemonía norteamericana en el considerado su «patio trasero». Si bien las diferencias entre proyectos y ritmos de esos gobiernos son evidentes, no cabe duda de que en todos esos casos la irrupción de las fuerzas progresistas ha supuesto un elemento positivo.
En algunos casos ese cambio ha llegado incluso a cuestionar las estructuras establecidas durante siglos de colonialismo y dominación, ofreciendo un modelo de desarrollo alternativo para sus países concretos, pero también para toda la zona.
Un proceso bien conducido de cambio implica lograr una transformación en los hombres que se involucran en los procesos de cambio, que hace que se esté más alerta, más flexible y para eso muchas veces tiene que iniciar un análisis de revisión interior y de autoconocimiento, como estimula la sociedad cubana en diversos procesos económicos y políticos a lo largo de la Revolución e incluso de su proceso histórico por parte de sus principales líderes revolucionarios para extraer las mejores enseñanzas.
“Si durante las décadas de los 70 y los 80 del pasado siglo, precisa Oswaldo, los movimientos insurgentes creados en las selvas latinoamericanas fueron un faro de esperanza para la izquierda mundial, ahora son los programas de gobierno de esos mismos movimientos los que reclaman la atención de quienes aspiran a un mundo más justo. Y reclaman esa atención no para ser reivindicados, juzgados o fiscalizados por sus camaradas occidentales. Simplemente dicen que América Latina resurge en sus brazos.”
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