jueves, julio 23, 2009

Un Premio Nobel para Mrs. Clinton

El interminable documento leído ayer por el Nobel Oscar Arias es mucho peor que los 7 puntos del acta de rendición que había propuesto el 18 de julio.

No se comunicaba con la opinión internacional a través de una clave Morse. Hablaba delante de las cámaras de televisión que transmitían su imagen y todos los detalles del rostro humano, que suele tener tantas variables como las huellas digitales de una persona. Cualquier intención mentirosa se puede descubrir con facilidad. Yo lo observaba cuidadosamente.

Entre los televidentes, la inmensa mayoría conocía que en Honduras tuvo lugar un golpe de Estado. A través de ese medio se informaron de los discursos pronunciados en la OEA, la ONU, el SICA, la Cumbre de los No Alineados y otros foros; habían visto los atropellos, los abusos y la represión al pueblo en actividades que llegaron a reunir cientos de miles de personas protestando contra el golpe de Estado.

Lo más extraño es que, cuando Arias exponía su nueva propuesta de paz, no deliraba; creía lo que estaba diciendo.

Aunque muy pocos en Honduras podían ver las imágenes, en el resto del mundo muchas personas lo vieron y también lo habían visto cuando él propuso los famosos 7 puntos el 18 de julio. Sabían que el primero de ellos decía textualmente: “La legítima restitución de José Manuel Zelaya Rosales en la Presidencia de la República hasta el fin del período constitucional por el cual fue electo…”

Todos deseaban saber qué diría ayer por la tarde el mediador. El reconocimiento de los derechos del Presidente Constitucional de Honduras, con las facultades reducidas casi a cero en la primera propuesta, fue relegado a un sexto lugar en el segundo proyecto de Arias, donde ni siquiera se emplea la frase “legitimar la restitución.”

Muchas personas honestas están asombradas y tal vez atribuyen a oscuras maniobras suyas lo que dijo ayer. Quizás yo sea uno de los pocos en el mundo que comprenda que había una autosugestión, más que una intención deliberada en las palabras del Nobel de la Paz. Me percaté de eso especialmente cuando Arias, con especial énfasis y palabras entrecortadas por la emoción, habló de la multitud de mensajes que Presidentes y líderes mundiales, conmovidos por su iniciativa, le habían enviado. Es lo que le pasa por la cabeza; ni siquiera se da cuenta de que otros Premios Nobel de la Paz, honestos y modestos, como Rigoberta Menchú y Adolfo Pérez Esquivel, están indignados por lo ocurrido en Honduras.

Sin duda alguna que gran parte de los gobiernos civiles de América Latina, los cuales conocían que Zelaya había aprobado el primer proyecto de Arias y confiaban en la cordura de los golpistas y sus aliados yanquis, respiraron con alivio, el cual duró solo 72 horas.

Visto desde otro ángulo, y volviendo a las cosas que prevalecen en el mundo real, donde el imperio dominante existe y casi 200 estados soberanos tienen que lidiar con todo tipo de conflictos e intereses políticos, económicos, medioambientales, religiosos y otros, solo falta algo para premiar la genial idea yanqui de pensar en Oscar Arias, para tratar de ganar tiempo, consolidar el golpe, y desmoralizar a los organismos internacionales que apoyaron a Zelaya.

En el 30 Aniversario del Triunfo de la Revolución Sandinista, Daniel Ortega recordando con amargura el papel de Arias en el primer Acuerdo de Esquipulas, declaró ante una enorme multitud de patriotas nicaragüenses: “Los yanquis lo conocen bien, por eso lo escogieron como mediador en Honduras”. En ese mismo acto, Rigoberta Menchú, de ascendencia indígena, condenó el golpe.

Si se cumplían simplemente las medidas acordadas en la reunión de Cancilleres en Washington el golpe de Estado no habría podido sobrevivir a la resistencia pacífica del pueblo hondureño.
Ahora los golpistas se están moviendo ya en las esferas oligárquicas de América Latina, algunas de las cuales, desde altas posiciones estatales, ya no se ruborizan al hablar de sus simpatías por el golpe y el imperialismo pesca en el río revuelto de América Latina. Exactamente lo que Estados Unidos deseaba con la iniciativa de paz, mientras aceleraba las negociaciones para rodear de bases militares la patria de Bolívar.

Hay que ser justos, y mientras esperamos la última palabra del pueblo de Honduras, debemos demandar un Premio Nobel para Mrs. Clinton.






Fidel Castro Ruz
Julio 23 de 2009
2 y 30 p.m.

SE ACERCA LA HORA CERO PARA HONDURAS

La hora CERO que marcará exactamente la entrada del presidente constitucional de Honduras José Manuel Zelaya está próxima a producirse. Ya comenzó su partida desde Nicaragua desprovisto de armas de fuego y acompañado por periodistas que cubrirán los pormenores del viaje.

Estados Unidos, como país inventor y protector del gobierno golpista, ha hecho hasta lo imposible de una forma burda y sentenciosa, para impedir que se produzca el retorno de Zelaya al país . Hay muchos intereses en juego: políticos, económicos, militares, estratégicos. Está claro que han perdido un terreno precioso que pensaron en una época tener asegurado. Los pueblos están cansados de tanta opresión y buscan salida a su pobreza y posibilidades de mejorar las condiciones de vida precisamente en los procesos democráticos participativos que enaltecen los derechos y oportunidades a las capas menos aventadas de la sociedad.

Es el caso de Honduras, mientras pensaron que podrían mantener sus privilegios como clase explotadora, los oligarcas dueños de más del 80 por ciento de las riquezas del país, sobrellevaron situaciones esperando el momento propicio para la agresión. Fue con el proceso de la Cuarta Urna, en la que el pueblo debía votar por el Sí o por el No, en el que tenía oportunidad de hacer y exigir las demandas por las que habían luchado muchos años y evitar de este modo el monopolio de las 13 familias controladoras del poder, es que se arremete contra el presidente Zelaya y el 28 de junio perpetúan el golpe de Estado.

La hora CERO sigue llegando, el pueblo espera a Zelaya y se prepara para protagonizar históricas jornadas de heroísmo y justicia por el bien de su propia historia, por el bien de la nación, por el futuro de sus hijos y por el presente luminoso que pueden tener si se defienden con fuerza, como aseveró Fidel, los principios y las aspiraciones más nobles de los pueblos q decidir por sí solo su destino.

En entrevista exclusiva para los medios que lo acompañan, Zelaya en sinceras declaraciones expresó: “Regresar a mi país es un derecho que nadie me puede negar allí está mi familia y mis hijos soy el presidente electo por la voluntad del pueblo…
“Defender los derechos no es un acto de provocación o de violencia, es un acto de justicia y dignidad”.

En ese sentido, reiteró que “en su comitiva van desarmados, con la intención de tranquilizar su nación y el deseo de encontrar a unas Fuerzas Armadas dispuestas a aceptarlo como presidente y comandante general del Ejército.

“A los soldados les recordó que ni la presidencia de la República, ni la comandancia general las escoge el Congreso, o la Corte Suprema de Justicia, sino el pueblo en las urnas, y por ello sólo el pueblo los puede quitar.”

Históricas jornadas les espera al movimiento de resistencia contra el golpe, la acción de las fuerzas populares es determinante en el logro del objetivo de derrumbar a la oligarquía golpista hondureña que se debate el espacio para retornar a Honduras los gobiernos militaristas, seguidores de lo más rancio de la derecha norteamericana que pretende socavar la dignidad del pueblo.

La Hora CERO está por llegar. ¡Ahora o nunca! Y con mucha fortaleza en los principios y en la dignidad plena del hombre, avanzar hacia la Victoria definitiva.

martes, julio 21, 2009

Goriletii además, es estafador

Vale la pena tomar en consideración la serie de trabajos publicados que tienen relación con el obrar engañoso, tramposo, lleno de ilegalidades del usurpador de la presidencia de Honduras Roberto Micheletti, quien sí tiene cuentas por las cuales responder, como su intento de modificar la Constitución hondureña en 1975, en 1983 ocupaba espacios en las listas de los vinculados y beneficiador con el cartel de la droga de Cali y ahora estafador: ¡Hasta cuándo!

Ve además:
Goriletti es también narcotraficante

El periodista Jean Gui Allard publicó hoy en Cubadebate un reportaje en el que demuestra que el personaje ilegal de Honduras es un bandido de carrera.

Por la importancia del material lo reproducimos a continuación:

Ciudad de Progreso, 15 de septiembre de 1980.

Erase una vez un Goriletti que tenia una empresa de transporte público llamada Gorili-TUPSA en la Ciudad de Progreso, pero no manejaba sus vehículos, solo tenia una oficina desde donde controlaba su negocio.Un día, aburrido en su oficina, se asomó por la ventana y vio llover. Llovió y llovió todo el día, llovió tanto que se crecieron los ríos, se desbordaron, las poblaciones quedaron asiladas. Goriletti pensó “El pueblo debe estar sufriendo: ¿Qué debo hacer?” y después de un rato caminando de aquí a allá, de allá a aquí, como un gran estratega, con los brazos detrás de la espalda, atribulado, midiendo y sopesando cada posibilidad de su accionar, hasta que después de 0,3 microsegundos de reflexionar y reflexionar gritó “¡¡EUREKA!!” y se puso en febril actividad para llevar a cabo su plan: aprovechar las lluvias para subir el precio del transporte de 1,40 lempiras a 4 lempiras, y así lo hizo!!!
Luego un pensamiento aterrador cruzó su espíritu, se acordó de la existencia de la ley y las instituciones del estado, pensó que su brillante plan se vendría abajo pero recordó que era DIPUTADO y que eso le daba inmunidad, qué importaba la ley si él mismo escribía la ley. Así que ya superados los obstáculos elevó los precios de sus autobuses y lanzó está proclama: !!Quién quiera viajar en Gorila-tours debe pagar 4 lempiras!!!

Pero de repente….

…..apresaron a Goriletti. El Capitán Hernán Seaman encargado de Transito de la Ciudad de Progreso agarró al buen Goriletti y lo mandó preso por adulterar el precio de las tarifas del transporte cuando el pueblo pasaba por un momento crítico de desastre natural producto de las lluvias.

Goriletti no lo podía creer, ¿acaso había ley para un diputado? ¿acaso había ley para un militante del Partido Liberal? Ah no, eso no podía quedarse así, movió sus contactos, llamó al partido, llamó y llamó y denunció que alguien lo quería poner bajo el orden de la ley, a él, que era padre de la patria, diputado, constituyente y además dueño y amo de los autobuses de Gorila-Tours.

Entre todos sus contactos logró levantar un pequeño ejército de conductores, miembros del partido liberal y otras personas que fueron hasta tránsito y lograron liberarlo y sacarlo en hombros del lugar.
Goriletti regresó a su pequeña oficina de Gorili-Tupsa, ese día había logrado mucho, el precio continuó a 4 lempiras, y él seguía por encima de ley, se sirvió un trago, y pensó “ojalá siga lloviendo”.

lunes, julio 20, 2009

Disculpen la molestia: armados contra los pobres

(Tomado de Cubadebate)
Por Eduardo Galeano

Si la justicia internacional de veras existe, ¿por qué nunca juzga a los poderosos? No van presos los autores de las más feroces carnicerías. ¿Será porque son ellos quienes tienen las llaves de las cárceles?

¿Por qué son intocables las cinco potencias que tienen derecho de veto en Naciones Unidas? ¿Ese derecho tiene origen divino? ¿Velan por la paz los que hacen el negocio de la guerra? ¿Es justo que la paz mundial esté a cargo de las cinco potencias que son las principales productoras de armas? Sin despreciar a los narcotraficantes, ¿no es éste también un caso de “crimen organizado”?
Pero no demandan castigo contra los amos del mundo los clamores de quienes exigen, en todas partes, la pena de muerte. Faltaba más. Los clamores claman contra los asesinos que usan navajas, no contra los que usan misiles.

Y uno se pregunta: ya que esos justicieros están tan locos de ganas de matar, ¿por qué no exigen la pena de muerte contra la injusticia social? ¿Es justo un mundo que cada minuto destina 3 millones de dólares a los gastos militares, mientras cada minuto mueren 15 niños por hambre o enfermedad curable? ¿Contra quién se arma, hasta los dientes, la llamada comunidad internacional? ¿Contra la pobreza o contra los pobres?

¿Por qué los fervorosos de la pena capital no exigen la pena de muerte contra los valores de la sociedad de consumo, que cotidianamente atentan contra la seguridad pública? ¿O acaso no invita al crimen el bombardeo de la publicidad que aturde a millones y millones de jóvenes desempleados, o mal pagados, repitiéndoles noche y día que ser es tener, tener un automóvil, tener zapatos de marca, tener, tener, y quien no tiene, no es?

¿Y por qué no se implanta la pena de muerte contra la muerte? El mundo está organizado al servicio de la muerte. ¿O no fabrica muerte la industria militar, que devora la mayor parte de nuestros recursos y buena parte de nuestras energías? Los amos del mundo sólo condenan la violencia cuando la ejercen otros. Y este monopolio de la violencia se traduce en un hecho inexplicable para los extraterrestres, y también insoportable para los terrestres que todavía queremos, contra toda evidencia, sobrevivir: los humanos somos los únicos animales especializados en el exterminio mutuo, y hemos desarrollado una tecnología de la destrucción que está aniquilando, de paso, al planeta y a todos sus habitantes.

Esa tecnología se alimenta del miedo. Es el miedo quien fabrica los enemigos que justifican el derroche militar y policial. Y en tren de implantar la pena de muerte, ¿qué tal si condenamos a muerte al miedo? ¿No sería sano acabar con esta dictadura universal de los asustadores profesionales?

Los sembradores de pánicos nos condenan a la soledad, nos prohíben la solidaridad: sálvese quien pueda, aplastaos los unos a los otros, el prójimo es siempre un peligro que acecha, ojo, mucho cuidado, éste te robará, aquél te violará, ese cochecito de bebé esconde una bomba musulmana y si esa mujer te mira, esa vecina de aspecto inocente, es seguro que te contagia la peste porcina.

domingo, julio 19, 2009

Se les acabó el tiempo a los gorilottis.

No hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo resista. Traspolando ese viejo refrán a la situación de la mediación de Oscar Arias en el conflicto hondureño, se podría decir que no hay golpe que dure más de un mes ni pueblo que lo resista. Ya los hondureños se adentran en una guerra de desgaste popular y lo estipulado en la Resolución emitida por Organización de Estados Americanos (OEA), sobre todo el inciso No. 2, que "exige el retorno al orden constitucional en la República de Honduras mediante el retorno de Zelaya en forma inmediata, segura e incondicional".

Como dijo Patricia Rodas, la Canciller del verdadero gobierno hondureño en el acto celebrado en Managua, Nicaragua, por el aniversario 30 de Frente Sandinista de Liberación Nacional, “se les acabó el tiempo; se acabaron los golpistas, este día comienza la marcha definitiva hacia Tegucigalpa (…) al frente nuestro presidente Manuel Zelaya”.

Con la prepotencia del bandido que se siente protegido, oído y representado, los golpistas se retiraron ayer, como expresé en el comentario, para “consultar con los amos la posición a asumir”. Era evidente que para ellos el juego no podía terminar ayer, incluso hoy. Las 72 horas previstas para adoptar una decisión ya van pos 200 y se estiran como el elástico y lo van a hacer estallar.

En realidad están protegidos, son capaces de oponerse con fuerza al retorno de Zelaya en primera instancia, tampoco asumen que han propinado un golpe de Estado y que son ellos los que han violado la Constitución, ponen nuevas condiciones y lejos de ser a ellos a los que se les va a aplicar la justicia, son los que injurian a Zelaya y lo amenazan de pasarlo por el Tribunal Supremo para que responda por las 18 acusaciones que tiene, entre ellas la de traición a la Patria y violación de la Carta Magna.

Hasta dónde se puede ser descarado. ¿No se han dado cuenta después de haber pasado más de 20 días que nadie que se respete los ha reconocido ni apoyado? Eso tiene sus lecturas y no hay peor ciego que el que no quiera ver.

Solo con la acción resuelta de los grupos sociales que llamaron al Paro Nacional, de los revolucionarios que abundan en Honduras y la masa del pueblo en la calle exigiendo volver al orden, a la constitucionalidad, a devolver la gobernabilidad arrebatada por la fuerza, que ha traído una estera de muertes, heridos, desaparecidos, perseguidos, allanados, torturados, reprimidos como si ese actuar fascista pudiera doblegar la decisión de un pueblo a conquistar sus derechos.

La extrema derecha norteamericana y las organizaciones terroristas que allí radican, se alimentan y actúan, estarán levantando copas por el fracaso planificado de la mediación y la plantada del presidentillo de facto, pero han olvidado que la vida transcurre a partir de la sucesión de los días: uno detrás de otro. No nos apuremos, los buenos, los honestos, las capas del pueblo explotadas, vilipendiadas y excluidas están seguras de la misión que les corresponde cumplir ahora para salvar la democracia y la constitucionalidad, que es salvar a su país y luchar por el presente y futuro de América.

NO es posible permitir semejante injuria a la libertad de los hombres, a la legitimidad de los gobiernos, al ejercicio del derecho internacional, a la autoridad de los organismos internacionales para hacer cumplir sus acuerdos y resoluciones.

¿Por qué no actúan y siguen dejando pasar el tiempo con discursos huecos, campañas y entretenimientos mediáticos? Lo que sí está claro es que la justicia tendrá que aplicarse consecuentemente y el daño que los gorilottis le han hecho al pueblo hondureño tendrán que pagarlo bien caro, incluso con sus propias vidas si fuera necesario.

La decisión está tomada, el pueblo enaltecido se dirige a Tegucigalpa, tocando las campanas que anuncia la decisión de emprender la ofensiva final contra los golpistas hasta reducirlos a cero a cualquier precio. Porque como bien expresó Fidel en su reflexión del 28 de junio, Un error suicida, “los golpistas, acorralados y aislados, no tienen salvación posible si se enfrentan con firmeza”.

Estamos seguros de que así será.

sábado, julio 18, 2009

Mediación elastizada

Quisiera ser muy serio en el tratamiento del controversial tema que es la mediaciónm, pero es que su propia inconsistencia me hace tambalear por mi encredibilidad en relación con lo efectivo que pueda ser esta última ronda de “conversaciones” entre los representantes del legítimo gobierno de Honduras con la camarilla golpista con Oscar Arias como “árbitro”.

Es inconcebible que el presidente constitucional y su delegación acepten los siete puntos propuestos por la mediación aunque en lo personal discrepo de algunos por su viso oportunista) para buscar una solución al conflicto y los ilegales usurpadores lo desaprueben en franca postura arribista, tratando de estirar como un elástico este proceso para ganar terreno y tratar de consolidar sus posiciones evitando la entrada de Zelaya al país.

Con la postura asumida por Arias nos demuestra paso a paso su complicidad con los actores intelectuales del conflicto, signados también para repensar la “solución” sin perder el espacio ganado por más de 20 días de desgaste de las fuerzas populares y de arribismo golpista a posiciones estratégicas del país centroamericano.

¿Qué mensaje quiere transmitirnos el mediador Arias cuando expresa “Ciertamente, aún hay diferencias entre las partes por lo que tenemos que hacer un esfuerzo para flexibilizar y acercar posiciones", dijo el mandatario a la salida de la reunión.”? ¿Quién tiene que ser flexible y con quién? Siempre se habló que no habría negociación, que los acuerdos adoptados por los organismos internacionales y resultantes de la mediación debían ser cumplidos sin condicionantes, entonces ¿qué sucede de nuevo con Micheletti y su pandilla negociadora?

El representante de los gorilettis, Carlos López le pidió a Oscar Arias estudiar poco más la propuesta, reflexionar sobre los puntos y hacer consultas a Tegucigalpa, mientras que los representantes de Zelaya representada por Rixi Moncada, aceptó la propuesta presentada por el presidente costarricense, incluso con el día y hora que se propone para el arribo del presidente constitucional a Honduras para encontrarse con su pueblo.
¿No les parece que este proceso al cuento de la buena pipa que nos hacían nuestras abuelitas a la hora de dormir?

Una jornada que inicialmente se anunció para un día iniciada el de julio ya alcanza los días. Se ha estirado tanto que el elástico está a punto de romperse y estallar porque en realidad no está desempeñando ninguna función. Ahora se plantea que mañana continúan a las 11:00 a.m. y podemos predecir que los que le han tenido que dedicar 15 horas más a meditar y consultar con sus amos en el norte sobre qué hacer, se presentarán con la negativa o con una sucia alternativa que impida el retorno del presidente y de la constitucionalidad al país el próximo viernes 24 de julio.

En un comentario que publiqué el 10 de julio bajo el título ¿Cuál es la mediación?, se exponía: “Esa mediación nació con malformación congénita y manipulada, puesta en práctica para ganar tiempo por parte de la dictadura golpista y sus acólitos y como una medida de desgaste sistemático, hablando en términos militares, para el gobierno constitucional y la acción del pueblo en defensa del retorno a su constitucionalidad.”

Estamos parados en la misma loza, los que tienen que exigir condiciones porque son los que están en el marco de la legalidad y apoyados por el concierto universal de las naciones son los que aceptan y los que no debieran tener voz ni votos, pretenden imponer condiciones… El mundo está patas arriba y en franca crisis de gobernabilidad.

Solo queda esperar a mañana para apreciar el desenlace de la incógnita que ha creado el hecho de que los usurpadores exijan 15 horas más de análisis y consultas “con el diablo”.

Mientras, nosotros seguimos aguantando bien fuerte el elástico para que no se reviente y las consecuencias sean mejores.

viernes, julio 17, 2009

Goriletti es también narcotraficante


En un reportaje del periodista Jean Gui Allar publicado por el sitio digital Cubadebate, se exponen las pruebas de cómo el presidentillo de turno en la asonada golpista de Honduras del pasado 28 de junio, también estuvo vinculado al cartel de la droga de Cali, la red del narcotráfico colombiana.

Según se precisa “aparece en una larga lista de narcotraficantes redactada, en una fecha no precisada, por un alto oficial del Ministerio de la Defensa y Seguridad Pública de Honduras que lo relaciona con el Cartel de Cali”.

Sobre el documento se demuestra que está firmado por René Adalberto Paz Alfaro, Coronel de Infantería, y lleva el membrete del ministerio: En el nombrado documento identificado en el número SN-FF. AA. 060, se ubica a Roberto Michelleti Bain con error de escritura, (Micheletti) con la “CONEXIÓN” Cartel de Cali y bajo la mención “LUGAR” la palabra “Yoro”. (Ver documento).

Vale destacar que en la década de los 80, es cuando el narco… comenzaba su vida política y ocupaba el cargo de presidente del Consejo Local en Yoro, donde siempre se hizo elegir de diputado al Congreso Nacional.

Cualquier similitud NO puede ser pura coincidencia, sino que habla de la calaña del golpista y de su deformada carrera alistado a la ilegalidad, la corrupción y a la falta de legitimidad. Recuerden que en 1985 también este personaje trató de hacerle enmiendas a la Constitución de Honduras en beneficio de la élite que ostenta el poder económico y quiere decidir los destinos políticos y de la sociedad hondureña.

Como bien se suscribe en Cubadebate, “la aparición del nombre de Micheletti en tal lista de narcotraficantes no deja duda sobre la presencia de su nombre en los ficheros de la DEA, la agencia norteamericana antidroga… Sin embargo, nada ha filtrado al respeto de fuente norteamericana, hasta ahora”, pero sí algunos congresistas norteamericanos de la extrema derecha encabezados por Mario y Lincoln Díaz Balart pretendieron desacreditar al presidente Manuel Zelaya solicitando al presiente Barack Obama que se investigara su posible vinculación al narcotráfico a través de la DEA, quedando esto sin respuesta presiencial.

¿Y entonces qué? ¿Quién es el narcotraficante, Zelaya o Micheletti? Una vez más se revolvieron en su propia salsa, se desmoralizaron y a la salida de estos trapos expuestos al sol, ¿qué van a decir?


jueves, julio 16, 2009

Lo que debe demandarse a Estados Unidos

(Tomada de Cubadebate)
La reunión de Costa Rica no conducía ni podía conducir a la paz. El pueblo de Honduras no está en guerra, solo los golpistas usan las armas contra él. A ellos habría que demandarles el cese de su guerra contra el pueblo. Tal reunión entre Zelaya y los golpistas solo serviría para desmoralizar al Presidente Constitucional y desgastar las energías del pueblo hondureño.

La opinión pública mundial conoce lo ocurrido en ese país a través de las imágenes difundidas por la televisión internacional, fundamentalmente Telesur, que sin perder un segundo transmitió fielmente cada uno de los hechos ocurridos en Honduras, los discursos pronunciados y los acuerdos unánimes de los organismos internacionales contra el golpe.

El mundo pudo apreciar los golpes que se descargaban sobre hombres y mujeres, los miles de gases lacrimógenos lanzados contra la multitud, los groseros gestos con armas de guerra y disparos para intimidar, herir o asesinar a ciudadanos.

Es absolutamente falsa la idea de que el embajador de Estados Unidos en Tegucigalpa, Hugo Llorens, ignorara o desalentara el golpe. Lo conocía, al igual que los asesores militares norteamericanos, que no cesaron un minuto de entrenar a las tropas hondureñas.
Hoy se conoce que la idea de promover una gestión de paz a partir de Costa Rica surgió en las oficinas del Departamento de Estado, para contribuir a la consolidación del golpe militar.

El golpe fue concebido y organizado por personajes inescrupulosos de la extrema derecha, que eran funcionarios de confianza de George W. Bush y habían sido promovidos por él.

Todos, sin excepción, tienen un grueso expediente de actividades contra Cuba. Hugo Llorens, embajador en Honduras desde mediados del 2008, es cubano americano. Forma parte del grupo de agresivos embajadores de Estados Unidos en Centroamérica, constituido por Robert Blau, embajador en El Salvador; Stephen McFarland, en Guatemala, y Robert Callahan, en Nicaragua, nombrados todos por Bush en los meses de julio y agosto del 2008.

Los cuatro siguen la línea de Otto Reich y John Negroponte, que junto a Oliver North fueron responsables de la guerra sucia contra Nicaragua y de los escuadrones de la muerte en Centroamérica, que costaron a los pueblos de la región decenas de miles de vidas.

Negroponte fue representante de Bush en las Naciones Unidas, Zar de la inteligencia norteamericana, y finalmente subsecretario de Estado. Tanto él como Otto Reich, por diversas vías, estuvieron detrás del golpe de Honduras.
La base de Soto Cano en ese país, sede de la “Fuerza de Tarea Conjunta Bravo” perteneciente a las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, es el punto de apoyo principal del golpe de Estado en Honduras.

Estados Unidos tiene el tenebroso plan de crear cinco bases militares más alrededor de Venezuela, con el pretexto de sustituir la de Manta en Ecuador.
La disparatada aventura del golpe de Estado en Honduras ha creado una situación realmente complicada en Centroamérica que no se resuelve con trampas, engaños y mentiras.

Cada día se conocen nuevos detalles de la implicación de Estados Unidos en esa acción, que tendrá también seria repercusión en toda América Latina.
La idea de una iniciativa de paz a partir de Costa Rica fue transmitida al Presidente de ese país desde el Departamento de Estado cuando Obama estaba en Moscú y declaraba, en una universidad rusa, que el único Presidente de Honduras era Manuel Zelaya.

Los golpistas estaban en apuros. La iniciativa transmitida a Costa Rica buscaba el objetivo de salvarlos. Es obvio que cada día de retraso tiene un costo para el Presidente Constitucional y tiende a diluir el extraordinario apoyo internacional que ha recibido. La maniobra yanki no incrementa las posibilidades de paz, sino todo lo contrario, las disminuye, y el peligro de violencia crece, ya que los pueblos de nuestra América no se resignarán jamás al destino que les tienen programado.

Con la reunión de Costa Rica se cuestiona la autoridad de la ONU, la OEA y demás instituciones que comprometieron su apoyo al pueblo de Honduras.
Cuando Micheletti, Presidente de facto, proclamó ayer que está dispuesto a renunciar a su cargo si Zelaya renunciaba, sabía ya que el Departamento de Estado y los militares golpistas habían acordado sustituirlo y enviarlo de nuevo al Congreso como parte de la maniobra.

Lo único correcto en este momento es demandar del gobierno de Estados Unidos que cese su intervención, deje de prestar apoyo militar a los golpistas y retire de Honduras su Fuerza de Tarea.

Lo que se pretende exigir al pueblo de Honduras en nombre de la paz, es la negación de todos los principios por los cuales lucharon todas las naciones de este hemisferio.

“El respeto al derecho ajeno es la paz”, dijo Juárez.






Fidel Castro Ruz
Julio 16 de 2009
1 y 12 p.m.

martes, julio 14, 2009

Empezó el "saltimbanqui" en el gobierno del Goriletti.

En Cuba llamamos “saltimbanqui” a estar de un lado a otro, sin estabilidad, fuera de control... “de aquí para allá”. Es lo mismo que le está sucediendo a algunos “funcionarios" públicos del desgobierno del Gorilotte, lo cual se convierte en una indiscutible debilidad.

Recuerden ustedes que su anterior “ministro de Relaciones Exteriores, Enrique Ortez Golinger, se destacó por su falta de ética y público desagravio al presidente Obama y al español Zapatero.

Al primero lo caracterizó como el “negrito que no sabe nada de nada” ni siquiera dónde queda Tegucigalpa, y al segundo como Zapatero a su zapato… Bueno, este inestable personaje el viernes último juró la cartera de Ministro de Gobierno de la camarilla de facto. Lo hizo como para estar verdaderamente a los pies de los golpistas, que es lo que siempre ha hecho: hacerle el juego a las cartas más sucias que pueda tirar un gobernante.

Pues el susodicho ministro, ya renunció. Solo duró en el cargo apenas tres días. ¿Qué está sucediendo? ¿Le está faltando credibilidad y confianza al Gobierno de facto?

El problema también se une a que las manifestaciones del pueblo se multiplican y enfrentan las acciones terroristas de los golpistas. La jerga popular canta a toda voz: “Nos tienen miedo, porque no tenemos miedo.”

Este no será el último, lo que no es legítimo queda rápidamente en el camino y más cuando se es tan inestable como Ortez, signado a ser un saltimbanqui.

¿Y ahora, a dónde va a parar? ¿Quién lo va a proteger del daño que le ha hecho al pueblo hondureño? ¿Cómo enfrentará su posición racista ante el amo del Norte?
El pueblo le ajustará las cuentas.

domingo, julio 12, 2009

Siguen los trapos sucios en la tendedera de los golpistas

El sitio digital Cubadebate publica hoy una información demostrativa que de al general Romero Vásquez de casta le viene al galgo ser rabilargo, como reza en el viejo refrán. Un golpista, infractor y usurpador de la Constitución no podía ser inmaculado sino un perfecto ladrón profesional.

El hoy comandante del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas hondureñas, que se anotó el punto de secuestrar y expulsar del país al Presidente constitucional José Manuel Zelaya, es de lo más representativo de la delincuencia. Fue arrestado y encarcelado en febrero de 1993 como cabecilla de una pandilla internacional de ladrones de carros. Antes robaba carros y ahora se roba el poder. Este fue el mismo personaje que después del golpe de estado técnico Zelaya destituyó de su cargo y después encabezó la asonada.

El artículo que publicó el periódico El Heraldo de Hondura expresa que 11 de los miembros de la “Banda de los Trece” fueron encarcelados, entre ellos Vásquez, quien se apropió de más de 200 vehículos para venderlos en países vecinos.

Otro periódico de la capital hondureña “La Tribuna” señala que: “Once personas detenidas por su supuesta participación en el robo de unos 200 automóviles de lujo, así como 12 de los 19 carros decomisados como prueba de convicción por la Dirección Nacional de Investigaciones (DNI), fueron puestas ayer a la orden del Juzgado de Letras Primero de lo Criminal de Tegucigalpa”, y precisa además “dos diputados tienen en su poder carros robados”.

Como pueden ver, el diablo los junta. Este personaje es el que encabeza el golpe de estado por los militares, elije a Micheletti como presidente y él ladrón de carros de lujo queda como General en Jefe de las Fuerzas Armadas de Honduras.

Hay más que decir de este monstruo, ya que su preparación terrorista se realizó en la Escuela de las Américas, esa academia militar yanqui, en la que como alumno aventajado, aprendió las excelentes técnicas de torturas, de desaparición, asesinato y desaparición de personas, muy empleadas durante muchos años allí, en Nicaragua y en otros países de Latinoamérica.
El pandillero internacional de ladrones de carros devenido por obra y gracia de la más rancia oligarquía hondureña como comandante de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas fue, “casualmente” uno de los asistentes a la embajada norteamericana en Tegucigalpa unos días antes y se cree que fue donde aprendió cómo realizar el golpe de estado a Zelaya.

No hay vergüenza. Los golpistas se desmoronan.

La evidencia sobre Estados Unidos

Hoy se debate si en realidad Estados Unidos tiene o no responsabilidad o conexión con el golpe de estado perpetrado por la oligarquía y los militares en Honduras el 28 de junio que provocó el secuestro, destitución y traslado a Costa Rica del presidente constitucional José Manuel Zelaya, propinando así un duro golpe a la constitucionalidad y creando un oscuro precedente en Latinoamérica en épocas de renacer democrático, pero varios especialistas se han pronunciado por establecer puntos de contacto entre la política aplicada históricamente por la nación del norte en la región, sus intereses actuales en ese país y la posición asumida públicamente por los representantes de su gobierno sin desestimar las realizadas por la extrema derecha y otros grupos retrógrados.

Una cosa es lo que se piensa y otra la realidad, o la presunción que sale de hilvanar hechos, criterios, compromisos, relaciones… No por gusto en la reflexión de Fidel “Un gesto que no se olvidará”, al referirse al golpe técnico y resaltar los valores del presidente Zelaya, concluye el párrafo diciendo: “Lo que allí ocurra será una prueba para la OEA y para la actual administración de Estados Unidos”.

No por gusto se refirió a Estados Unidos y el papel que debía jugar en ese hecho y en lo que avizoró tres días antes y también reiteró que ese gobierno no tiene vida sin el oxígeno de Estados Unidos.

En un trabajo bien condimentado publicado por Telesur y Kaosenlared, la periodista Eva Golinger nos dice refiriéndose a los hechos de Honduras “Mientras ocurría el golpe de estado, los militares estadounidenses y los representantes de Washington en la embajada estadounidense en Tegucigalpa tenían conocimiento pleno de los sucesos.

Ante tal aseveración, no deja mucho espacio a lo expresado por el presidente Zelaya en relación con todo Hugo Llorens, el embajador de EE.UU, y su inocencia en relación con los hechos, corroborados después por la canciller Patricia cuando le realizó múltiples llamadas telefónicas sin respuesta alguna.

No se puede soslayar el hecho de que en el país centroamericano se encuentra enclavada la base Soto Cano, la cual constituye la sede de la Fujerza de Tarea Conjunta denominada “BRAVO” (JTF-B) de Estados Unidos, integrada por efectivos de las fuerzas aéreas, de seguridad conjuntas y el Primer Batallón-Regimiento No. 228 de la aviación estadounidense, que agrupa a más de 650 ciudadanos norteamericanos y hondureños que viven en los cuarteles militares allí enclavados. Tanto poderío y ubicación estratégica en la región encierra también serios compromisos.

Si bien la presidencia de Estados Unidos, la Secretaria de Estado Hillary Clinton, entre otros se han pronunciado públicamente por reconocer como único presidente legítimo a José Manuel Zelaya, no han realizado acciones contundentes para contribuir al retorno a la constitucionalidad y un poco se están codeando con el gobierno de facto. En la propia conversación de la Clinton con Micheletti para conocer su parecer en cuanto a la propuesta de mediación, se le estaba considerando como legal presidente. A partir de ello, el gorilote comenzó a redoblar su blasfemia, a condicionar situaciones, a exigir seguridad y lugar para reunirse, hacer anuncios constitucionales, entre otros.

En un trabajo anterior me referí a la respuesta dada por la Clinton a los periodistas, cuando culminó la reunión con Zelaya, en la que indagaron acerca de que si ese regreso al orden constitucional de Honduras, implica el retorno del presidente Zelaya a lo cual contestó: "Ahora que tenemos un proceso de mediación que podría comenzar pronto, no quiero prejuzgar lo que las partes van a acordar. Es bueno que las partes con el presidente Arias como ayuda, resuelvan estos temas". Y dejó lo más importante del proceso en el aire para que “cada cual saque sus propias conclusiones”. No se comprometió con el tema.

Las recién concluidas intenciones de llegar un consenso entre el gobierno legítimo y el golpista para el deceso del último, fueron totalmente infructuosas y desde un inicio manifestamos que nacieron con malformación, porque ninguno de los principios tenidos en cuenta se cumplió y los golpistas, con una arrogancia y prepotencia que sobrepasaban los límites permisibles, se retiraron sin conversar, ni acordar nada.

Entonces, ¿De dónde sale el alimento que nutre a esta camarilla que por más de 13 días está sin recibir dinero, suministros, combustible para mantenerse y la economía del país paralizada?

Si el gobierno de Estados unidos, está realmente en contra del golpe de estado, ¿qué va a hacer? ¿Aplicará las medidas restrictivas anunciadas y aplazadas para el lunes último “apara observar el desarrollo de los acontecimientos” y nada?
En la reflexión de Fidel “Muere el golpe o mueren las constituciones” expresa que mientras el presidente Obama en Europa ratificaba que el presidente Zelaya era el único reconocido “mientras, en Washington la extrema derecha y los halcones maniobraban para que éste negociara el humillante perdón por las ilegalidades que le atribuyen los golpistas… Honduras es hoy no solo un país ocupado por los golpistas, sino además un país ocupado por las fuerzas armadas de Estados Unidos.”

Está claro para todos que si bien la élite del gobierno no ha hecho compromisos públicos con los golpistas sí existe una historia muy difícil de borrar sobre la actuación de Estados Unidos en el área desde mediados del siglo XX y la raíz de su posicionamiento actual en Honduras. Baste recordar la ocupación colonial de esa región por los norteamericanos a lo largo del siglo XX, de lo que dio el nombre terrible de “repúblicas bananeras” para las naciones centroamericanas, cuyos pueblos han dado muestra de una larga resistencia.

Unos 400 000 muertos suman ya las resistencias a las dictaduras militares impuestas en la región durante el siglo XX. Si se le suma a los muertos y desaparecidos en Guatemala, en Nicaragua bajo la dictadura de Zomoza y en E Salvador, se justifica perfectamente esa cifra que es posible sea superada.
Debemos analizar el Golpe de Estado en Honduras en ese contexto porque si eso se permite y no se restituye la constitucionalidad en el país con el regreso de Zelaya, el hemisferio peligra y como tituló Fidel su última reflexión: “Muere el golpe o mueren las constituciones”, que es igual decir “mueren las democracias elegidas por los pueblos” “un grupo de terribles golpes de estado pueden desencadenarse” y arrasar con los logros de los pueblos durante estos años de duro batallar. Los golpes se pueden multiplicar en la tarea demoledora de desestabilizar gobiernos contando con el apoyo la National Encowment Foundation (NED) y la USAID (Agencia Internacional para el desarrollo (USAID), es decir la CIA estadounidense, responsable también de la guerra contra Nicaragua y la invasión a Panamá en 1989, entre otras actuaciones “memorables” en la región.

El retiro de las nubes iniciales, abren paso a la luz, el cielo se despeja, los hombres evalúan la situación, el pueblo sigue aferrado a su historia y a sus principios elementales, pero hay algo más en este golpe porque no podemos pensar que es solo la repetición de viejas formas de hacer de los golpistas con la decisiva participación del poder de la oligarquía en contubernio con las fuerzas militares, sino que hay ingredientes muy provocativos, intencionados, que parecen hechos para colocar al presidente Barack Obana frente a un hecho bien consumado para ver su actitud tomando como referente lo ocurrido con el ex presidente James Carter en tiempos en que tuvo relación con algunas dictaduras “por debilidades de los nuevos gobernantes”.

¿Qué hará Obama ahora? Ya el presidente Hugo Chávez le puso el ultimátum al embasarlo en relación a tomar partido con acciones concretas. ¿Cuándo será? ¿Esperará el desgaste de los manifestantes o la llegada por la fuerza en acción inteligente y sorpresiva de Zelaya? ¿Qué pasará cuando Zelaya llegue a Honduras y cuál será la actitud del gobierno golpista ante ese hecho? ¿Qué hará entonces Estados Unidos?

Son interrogantes que nos llaman a la reflexión porque en realidad son fuertes y difíciles según el curso de los acontecimientos. Solo hemos querido reflexionar al respecto hilvanando ideas y hechos por lo que será necesario tener en cuenta la historia y abrazarse al presente para evaluar con justeza el curso de los acontecimientos.

Fuentes: Telesur, Kaosenlared, Cubadebate y Prensa Latina.

El regreso de Zelaya es lo constitucional

Es llevado y traído en estos días si se logra por fin el regreso de Zelaya a Honduras y con él la eliminación del gobierno de facto que lo despojó de sus funciones el domingo 28 de junio.

No ha sido cosa fácil ese retorno. Los que arrebataron están queriendo sellar la jugada y lograr el tiempo necesario para un cambio de estrategia de modo que les permita adelantar elecciones o convocar a una constituyente.


Este Goriletti usurpador, quien llegó al poder haciendo ver que estaba en pleno ejercicio previsto en la Constitución vigente en Honduras, tiene una larga historia en la política y en el empeño de cambiar las constituciones, hecho que ha estado silenciado por los medios de comunicación durante años. En 1985, trató de convertir el Congreso Nacional hondureño en una Asamblea Nacional Constituyente para reformar la Carta Magna que actualmente defienden los golpistas como su símbolo trascendental ante la actual crisis política.

Según se plantea en Telesur, “en aquella época se presentó una trifulca y fue suspendida la presentación de la propuesta, dado que en aquél entonces la acción de Micheletti también se consideró traición a la patria y los diputados opositores del partido nacionalista sabían que esa Constituyente únicamente buscaba la extensión del mandato del presidente liberal Suazo Córdoba.”

Tal apego a las ilegalidades lo hacen imputar a Zelaya 18 cargos para ser ajusticiado por la ilegal Corte Suprema de Justicia, lo que a criterio de expertos abogados hondureños, es una gran mentira y estratagema de los sicarios para demeritar la imagen del presidente Zelaya, al que incluso, han acusado de traición a la Patria.

Siguen luchando los hondureños organizados en el Frente Único de Resistencia, quien aglutina a los sectores y organizaciones sociales que se oponen al golpe y reclaman el retorno de la constitucionalidad al país, el cese de las violaciones de los más elementales derechos humanos, el maltrato, las agresiones, los allanamientos, los secuestros y la aplicación de todos los métodos fascistas y terroristas que han practicado en el hemisferio las dictaduras militares.

Pero lo único constitucional, plantean, es el regreso de Zelaya y con él los derechos constitucionales de los hondureños a decidir como pueblo su propio destino, sin que las oligarquías representativas de las 13 familias acaudaladas que controlan las riquezas del país, tengan nada que ver. La única democracia es la que el pueblo decide su propio destino, la que los representa, la que les da voz y voto y trata de equiparar las oportunidades de todos sus hijos a pesar de tener que convivir en sociedades y en un mundo en que la equidad es una palabra casi inexistente.

En entrevista concedida hoy a Telesur, desde Washington, el presidente constitucional de Honduras José Manuel Zelaya ratificó: “En cualquier momento, en cualquier día, en cualquier lugar. Eso es parte de una seguridad que ellos tienen que tener, ellos me conocen perfectamente y saben que no van a poder evitar, no van a poder gobernar, en un sistema de facto en Honduras, ni el pueblo lo permite, ni la comunidad internacional, ni nosotros y estaremos dispuestos siempre a estar frente al pueblo."