El Campismo Popular en su primer cuarto de siglo de existencia ha acogido a 23 millones 400 000 cubanos que han asimilado una bocanada de vida.
Esa fue la máxima dejada por el Comandante en Jefe Fidel Castro, inspirador del pensamiento futurista, comprometido con su pueblo por más de 47 años, cultivador de la salud y el bienestar por medio del fomento de la actividad física, en perenne contacto con la naturaleza que, como una de las grandes maravillas de que nos dotó esta tierra, es atrapada por el Campismo Popular como una forma de turismo popular que desarrollamos los cubanos desde hace 25 años.
La primera base de Campismo Popular fue “La Cueva de los Portales” inaugurada por esta fecha en la provincia de Pinar del Río el 16 de mayo de 1981.
Al celebrarse hoy el acto central por el primer cuarto de vida de esta modalidad recreativa, Fidel precisó que en Cuba el campismo no tiene fines lucrativos, sino que es una actividad de carácter educativo y de esparcimiento para la población.
Ante fundadores y directivos del Campismo Popular, dirigentes de la Unión de Jóvenes Comunistas, estudiantes universitarios y trabajadores sociales, Fidel señaló que en Europa o cualquier otro lugar del mundo esta forma de recreación cuesta millones de dólares en tanto aquí, de una manera bien organizada, se concibe como un sano modo de disfrutar el tiempo libre. Estamos atendiendo esta actividad y cada vez lo haremos más y mejor, y cada vez el pueblo tendrá también más cultura y más conocimiento, dijo el Comandante en Jefe, quien elogió el resultado del trabajo de todo el personal que se desempeña en este frente, mayoritariamente joven.
Expresó que el país comienza a aportarle recursos adicionales al campismo, lo cual ha hecho de forma priorizada con otras esferas como la salud pública, la educación, el desarrollo de la computación y la producción de alimentos.
Tras referirse a algunos de los avances que el pueblo disfruta en estos y otros sectores, manifestó que mucho de los adelantos que hoy se están observando son fruto de las ideas nacidas en los momentos de grandes dificultades económicas, cuando muchos pensaron que la Revolución se derrumbaría.
Destacó en tal sentido las medidas adoptadas en el terreno económico como la sustitución del dólar por el peso convertible cubano y también en lo social con la organización de los trabajadores sociales que hoy suman más de 20 mil.
Reiteró el significado de las ideas las cuales, dijo, pueden convertirse en oro pero con mucho más valor, pues no tienen límite.
El acto nacional por el aniversario 25 del Campismo Popular tuvo lugar en la Base Los Cocos, del litoral norte de La Habana.El 16 de mayo de 1981 fue organizado, en seis bases de la provincia de Pinar del Río, este plan de sana de recreación en contacto directo con la naturaleza, ideado por Fidel y dirigido por la UJC, y que ha acogido a los cubanos en más de 23 millones 400 mil ocasiones.
Aseveró hoy que Cuba está convirtiendo las ideas en grandes avances sociales, en medio de un mundo que puede compararse con un océano de lágrimas.
Durante un acto por el primer cuarto de siglo del campismo popular, el líder revolucionario expresó que en la Isla las ideas se transforman en salud, en perspectivas de vida, en felicidad para los seres humanos.
Mencionó el papel que en ese sentido desempeñan los 28 mil trabajadores sociales, a quienes calificó como una fuerza que ganará la batalla a las fuerzas negativas en toda la sociedad.
Fidel reconoció que el Periodo Especial contribuyó al desarrollo de elementos degenerativos, pero -añadió- “en estos tiempos gloriosos que estamos viviendo, surge una fuerza pujante, generadora de valores, de ideas, de ética, de seres humanos, de hermanos y no de enemigos”.
Subrayó que así se forman personas solidarias, inteligentes, capaces de dominar los instintos y no que sean los instintos los que dominen a los seres humanos.
Al inicio de su intervención, el mandatario indicó que el país reúne casi todos los recursos económicos con ideas justísimas y tras afirmar que “hay muchas ideas convertidas en divisas convertibles”, reiteró que estas son más valiosas que el oro porque no tienen límites.
El Presidente cubano remarcó, luego de referirse a los avances socioeconómicos del país y de la Revolución Energética, que "este pueblo con su trabajo y sus esfuerzos se está ganando un premio no solo en su propio beneficio sino en beneficio de toda la humanidad".
Dijo que con los nuevos programas e ideas de la Revolución "nos iremos enriqueciendo cada vez más y estaremos contribuyendo a evitar las guerras, y a la supervivencia de la especie humana".
El Comandante en Jefe indicó que ningún país puede olvidarse de los demás, y subrayó que el resto del mundo dependerá de cada uno de nosotros y cada uno de nosotros dependerá del resto del mundo, para finalizar su intervención exclamando
