La obra más “perfecta” de la naturaleza

Por Abel Pérez García

En el Día Mundial de la población, que se celebra cada 11 de julio, dedico un aparte para reflexionar acerca  de nosotros, que como seres humanos y centro de esa categoría demográfica llamada pueblo,  esa de la que habló Fidel en múltiples ocasiones desde su alegato de defensa “La Historia me Absolverá, y que después en múltiples escenarios nacionales e internacionales precisó con excelencia la valía de defender la especie humana, en peligro de extinción.

“Digamos adiós a las armas y consagrémonos
civilizadamente a los problemas más agobiantes
de nuestra era, esa es la responsabilidad y el deber
más sagrado de todos los estadistas del mundo.
Esa es, además, la premisa indispensable de la
supervivencia humana.”
ONU-12 de Octubre 1979.

“Los hombres van en dos bandos van en dos bandos, los que aman y fundan y los que odian y deshacen”, nos legó  José Martí.

Desde niño siempre oí decir que “la obra más perfecta de la naturaleza, era el ser humano”
Con esa frase crecí, siempre la he tenido en mente. Ya de adulto pienso que la frase está incompleta, le falta algo que la vida y la historia de la humanidad lo está corroborando.

Como especie no hay dudas, pero como ser social el modo de actuar de muchos hombres deja mucho que desear. 

Nacemos sin inclinaciones de conducta, nos enseñan a ser buenos o malos, a querer o a odiar, a cuidar o romper.

Ningún sistema de educación en el mundo promueve ni enseña en sus textos escolares los malos hábitos y las malas conductas.

La ciencia ha demostrado que el ser humano piensa y actúa de acuerdo al medio en que se desenvuelve.

¿Qué explicación tiene que esa obra más perfecta de la naturaleza, otros perfectos traten de desaparecerla?

He leído sobre política, religión y otras creencias, y en ninguno de esos textos he visto que profesen la destrucción del ser humano, todo lo contrario. También he llegado a la conclusión que los que quieren que el hombre desaparezca son los que mandan, o los que mal mandan. 

Sí, los que mal mandan:

-A amenazar o amenazan a los que creen más débiles a mentir, o mienten para lograr sus objetivos perversos,

- a bloquear o bloquean económica, financiera, comercial y culturalmente a países indefensos, sumiendo a sus pueblos al hambre y la desesperación,

- a golpear o golpean a manifestantes pacíficos cuando solamente reclaman sus derechos. Utilizan gases lacrimógenos, balas de goma, sustancias paralizantes, o utilizan aguas desde carros bombas y sin mirar sexo o edad,

- a invadir o invaden a pueblos hermanos o los ponen luchar entre ellos, a matar o matan bombardeando sin piedad a pueblos indefensos con todo tipo de armas,

- a robar o roban lo que pertenece a otros,

- a votar o votan alimentos mientras millones de seres humanos no tienen qué comer,
- a hacer daño a tu salud, o te lo hacen,

- a hacer malas acciones o las hacen para que tú no progreses,

- a producir o producen medicamentos cuyos efectos secundarios o colaterales hacen más daño que las enfermedades que curan,

- a contaminar o contaminan el Medio Ambiente,

- a retirarse o se retiran de tratados que benefician a toda la humanidad,

- a violar o violan la Carta de las Naciones Unidas y de otros organismos internacionales,

- a violar o violan los Derechos Humanos en el planeta,

- a prohibir o prohíben la emigración de personas desesperadas a sus países, siendo ellos a veces los causantes de ese desconcierto,

- a beneficiarse o se benefician del sacrificio de otro,

- a destruir o destruyen lo que ha creado el hombre a lo largo de toda la civilización,

- a torturar o torturan salvajemente a seres inocentes,

- a imponer o se imponen por la fuerza y no por la razón,

- a apropiarse o se apropian de las riquezas y los recursos naturales de otras naciones utilizando su poderío,

-Los que mandan en nombre de…a arrasar o arrasan con todo y con todos los que se interpongan en su camino.

Los que mal mandan
- a esclavizarte o te esclavizan a favor de sus intereses,

- a tronchar o quebrantan el futuro de tus hijos y el fin de tus familiares y allegados.

¿Los seres humanos tendremos conciencia del posible holocausto al  qué estamos expuestos?

Al parecer este tipo de hombres  que mal mandan, no forman parte de la obra más perfecta de la naturaleza.    

Como mujeres y hombres que amamos nuestra especie, sintamos en lo más profundo el amor a la justicia, al honor, a la ética y la hidalguía que nos una como una y guíe como una gran fuerza para enfrentar la maldad, la destrucción y el egoismo del imperio contra nuestros pueblos. Solo así lograremos que en realidad nuestra especie dje de estar en peligro de desaparecer y sea la obra más perfecta de la naturaleza.