Por Salim Lamrani
Tomado de La pupila insomne
Tomado de La pupila insomne
Al leer el blog de la disidente cubana Yoani Sánchez,
es inevitable sentir empatía por esta joven, que expresa abiertamente
su oposición al gobierno de La Habana. Describe escenas cotidianas de
privaciones y penurias de todo tipo. “Una de esas escenas recurrentes es
la de perseguir los alimentos y otros productos básicos en medio del
desabastecimiento crónico de nuestros mercados”, escribe en su blog Generación Y. [1]
De hecho, la
imagen que Yoani Sánchez presenta de sí misma – una mujer de aspecto
frágil que lucha contra el poder del Estado y contra dificultades de
orden material- está muy lejos de la realidad. En efecto, la disidente
cubana tiene un nivel de vida que casi ningún otro cubano de las Isla de
Cuba se puede permitir.