Jorgito, un pícaro nene que aún no abraza los cinco años anoche no durmió esperando el gran día en que por primera vez tendría una maestra en su escuela del reparto Chacón en la Isla de la Juventud y podría comenzar su largo viaje por el camino del saber y de su completa realización social y profesional.
Nada puede sustituir a la sonrisa de un niño, su verdadera satisfacción y amor porque ellos lo entregan con honestidad. Hoy amaneció la Isla florecida y los más pequeños y jóvenes asaltaban las aulas que los recibieron también rejuvenecidas.
Un inigualable desfile de mochilas a la espalda, el abrazo de los amigos de siempre, el beso de la maestra y el apretón de manos al “profe” que les conducirá el saber y muchos consejos. No faltó el llantito que se le escapó al primerizo, pero muy pronto fue sumido por el contagio.
Fueron 61 los centros rehabilitados de 86 dañados por los huracanes el pasado año, pero hoy, con la huella de padres y trabajadores vistieron sus mejores galas para recibir a sus muchachos.
Más de 1 000 maestros y profesores junto a un pelotón de jubilados reincorporados a las aulas, comenzaron el viaje hacia estadios superiores en la calidad de la docencia y de la educación marcadas por una mayor incidencia en los métodos para apropiarse del conocimiento, en la consolidación de valores, el fortalecimiento del sentimiento patriótico y el apego a la historia Patria y del terruño.
Todo lo anterior se refiere con facilidad, pero lo que en realidad guarda un protagonismo inigualable es la voluntad política del Estado cubano, que en el centro de fuertes presiones de todo tipo por el férreo bloqueo, el arrastre del período especial por más de 15 años y la objetiva Crisis Global que señorea en todas las esferas de la vida, eroga casi la tercera parte del presupuesto estatal para llenar de libertad y salud a sus hijos, siguiendo la máxima del Apóstol José Martí cuando nos aseveró que “ser cultos es el único modo de ser libres”.
Llegan los trabajadores del sector con un mayor estímulo por las modificaciones cualitativas por las que atraviesa el sector, la modificación de la política salarial que beneficia a trabajadores, especialistas, docentes, adjuntos y cuadros de todas las enseñanzas y niveles.
En la Isla, continúan las secundarias básicas y los preuniversitarios en la ciudad compartiendo espacios con los más pequeños mientras que se ha dedicado un centro a la formación de maestros, tanto para los captados para la secundaria básica pre-pedagógica como los pre-universitarios con ese propósito, todo ello para tener garantía de la continuidad de la educación para varias generaciones.
Fue hoy un día de luz en esta ínsula, matizado por las flores y la sonrisa que inundaron las aulas como símbolo de amor.